Fandicosta enfila su traspaso con ofertas en firme de las pesqueras Wofco e Interatlantic

Compañía y acreedores apremian la operación por “acuciantes” problemas de tesorería | Cabomar, fuera de momento de la puja | La subrogación de los trabajadores, incluida

El reefer “Frio Aegean”, frente
a las instalaciones de
Fandicosta.  | // R. GROBAS

El reefer “Frio Aegean”, frente a las instalaciones de Fandicosta. | // R. GROBAS / Lara Graña

Lara Graña

Lara Graña

El plan de reestructuración de Fandicosta tendrá como eje la transmisión de la factoría de Moaña –con la sala de elaborados, el frigorífico y parte del pasivo–, aunque será insuficiente para subsanar todos los problemas de liquidez extendidos a otras compañías (Peixemar o Casa Botas) del grupo que preside Ángel Martínez Varela. Por esto las negociaciones con la banca y demás acreedores trascenderán a la venta de estas instalaciones, ubicadas en un emplazamiento privilegiado y por las que mostraron su interés tres entidades de referencia en el sector: Worldwide Fishing Company (Wofco), Grupo Interatlantic y Cabomar Congelados.

Con el asesoramiento legal de Garrigues, es la consultora Deloitte la encargada de pilotar una reestructuración que corre prisa. No solo por los plazos fijados en la ley concursal –tres meses desde la solicitud de preconcurso, registrada a mediados de octubre–, sino también por los apuros “acuciantes” de tesorería. Fue la propia compañía la que apremió la presentación de ofertas formales y vinculantes, y dos de las interesadas las han entregado ya: Wofco e Interatlantic Fish. La tercera en la terna, la marinense Cabomar, no lo ha hecho, como ha contrastado FARO en distintas fuentes conocedoras del proceso. ¿Objetivo? Dejar allanada la transacción para antes de final de año.

Las aspiraciones

El interés de Wofco en Fandicosta radica en la misma columna vertebral de su plan de negocio futuro, el mismo que le hizo adquirir las antiguas instalaciones de Aucosa en Redondela. La empresa que lideran Alberto Barreiro y Borja Tenorio, en fulgurante expansión, necesita una sala de elaborados para la transformación y valorización de producto, teniendo en cuenta además los volúmenes de pescado que comercializa y que las instalaciones de Teis se le han quedado pequeñas. Con esta actuación de Chapela bloqueada por un mar de trámites, la oportunidad de asumir Fandicosta era irrechazable.

El potero “Xin Shi Ji 18”, de la compañía Pesquera Cruz del Sur. |   // FDV

El potero “Xin Shi Ji 18”, de la compañía Pesquera Cruz del Sur. | // FDV / Lara Graña

La posición de partida de Interatlantic Fish era distinta. Forjada bajo un concepto de trader, ahora dispone de instalaciones físicas en Vigo (Galiciamar), además de controlar la comercializadora Getfish. De igual modo, Luis Cabaleiro ha visto en la factoría de Moaña una opción de crecimiento inorgánico exponencial en el negocio de la logística de frío, y una inmersión a lo grande en la transformación de pescado.

Teniendo en cuenta que esta operación incluye la asunción de parte de la deuda, la quita planteada a la banca es determinante a la hora de tener en cuenta la opinión del pool. Wofco ha planteado un descuento inferior, según pudo saber FARO, pero no han trascendido las ratios. Ambas propuestas incluyen, como demandaba la Xunta –tiene el 12,15% de la sociedad a través de Sodiga– la subrogación de los puestos de trabajo.

Como advirtió este periódico, Fandicosta SA alargó diez años la vigencia para el uso de los terrenos portuarios de Domaio –hasta 2038– con el compromiso de ejecutar una inversión superior a los 9,6 millones de euros. Por eso la evaluación tuvo muy en cuenta el estado de las construcciones –totalmente rehabilitadas después del incendio de 2016– y sus potencialidades. La superficie de la concesión roza los 35.400 metros cuadrados y fija un mínimo de mercancía movida cada año de 38.484 toneladas. Wofco e Interatlantic ya comercializan por encima de ese umbral a día de hoy; Cabomar estaría en disposición de hacerlo con más capacidad productiva y frigorífica.

El problema adicional que enfrenta Ángel Martínez es cómo resolver la situación de las demás empresas de su grupo. Además de las instalaciones de Vilagarcía (Bonfrig Ultracongelados), por las que recibió una oferta de unos cuatro millones de euros, la continuidad futura del negocio de Botas o Peixemar está en el aire. El escenario que encara su participada en Argentina es distinto. Se trata de Pesquera Cruz del Sur, que explota dos buques poteros en alianza con Gandón SA. La armadora abonó unos cuatro millones hace dos años por el 50% del capital; el desembolso que tendría que hacer ahora en caso de querer tomar la totalidad de los títulos sería ahora previsiblemente inferior.

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