Revuelta vecinal en Nigrán contra el cierre de un camino

El barrio de Camesella se resiste a que el dueño del vial lo una a su finca para construir

Exigen una solución al Concello y el alcalde considera que debe reabrirse

Los vecinos, concentrados ayer para exigir la reapertura del vial que, según dos sentencias, es servidumbre de paso

Los vecinos, concentrados ayer para exigir la reapertura del vial que, según dos sentencias, es servidumbre de paso / Marta G. Brea

“Eu teño 86 anos e baixei moitas veces no carro de pequena por aquí”, asegura María del Carmen Fernández. “E eu setenta e pico e recordo pasar toda a vida”, comenta su vecina y tocaya, apellidada Álvarez. Son dos de las cerca de cuarenta personas que se concentraron ayer en el barrio de Camesella, en la parroquia de San Pedro da Ramallosa, municipio de Nigrán, para mostrar su rechazo al cierre del camino que lo cruza y que da acceso a sus casas y a las de núcleos próximos como el de Soleiro, Igrexa, Souto...

El propietario del vial ha cortado el paso en un tramo de unos 40 metros con un muro por un extremo y un precinto por el otro. Su intención es unirlo a su parcela y ganar superficie para construir. El vecindario ha decidido rebelarse y exigir una solución al Concello para “non perder unha vía de paso de sempre”.

Revuelta vecinal en Nigrán contra el cierre de un camino

El camino, cerrado al paso de los vecinos. / Marta G.Brea

José Ramón González Veiro es el propietario de la parcela y del camino. Así lo confirman dos sentencias, del Juzgado de Primera Instancia Número 2 de Vigo y de la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Pontevedra. Compró el terreno en 2015, calificado como edificable, asegura, para levantar una vivienda. Ahora está “facendo un peche con autorización municipal e con dúas sentenzas xudiciais a favor”, recalca. Sobre el muro que impide el paso asegura que “segue a aliñación que marca o Concello”.

La controvertida pared ha sido denunciada ante la Guardia Civil y ante la oficina de Urbanismo del Ayuntamiento por parte de Ángel Alonso, portavoz de la revuelta vecinal. Es su último cartucho en una lucha que ha perdido en los tribunales. Las dos sentencias a las que alude el dueño del camino fueron desfavorables para él. Había reclamado por vía judicial la incorporación de la vía al patrimonio público del Concello de Nigrán, pero los jueces no encontraron pruebas suficientes y confirmaron que “la franja litigiosa no puede considerarse de titularidad pública, pues se trata de un camino de servidumbre que atraviesa y grava la propiedad del demandado”.

Dos sentencias afirman que el camino no es público, pero está sujeto a una servidumbre de paso

Es esa servidumbre de paso que citan los fallos judiciales la que podría salvar el uso público del camino. Así lo indica el alcalde, Juan González. Tras presentarse en Camesella para conocer las reivindicaciones de los vecinos y consultar el expediente con los técnicos del departamento de Urbanismo, el regidor considera que, si se trata de una servidumbre, “non se podería cortar”.

Es el argumento que deben utilizar ahora los vecinos por la vía judicial, explica. Pero ahora, en lugar de reclamar la titularidad pública de un camino “que non figura en ningún lado como parte do patrimonio colectivo”, habrá que luchar por su uso público histórico, aunque siga formando parte de la propiedad de González Veiro. El testimonio de los veteranos del lugar confirma que se ha utilizado a pie y en carro durante más de un siglo. Algunos de ellos, como José González Estévez, hacen hincapié en que “este camiño ten alumeado público” y en que el Ayuntamiento costeó el hormigón “na época de Avelino Fernández”, alcalde entre 1987 y 1995. Fueron los propios vecinos los que lo pavimentaron entonces.

El músico Amaro Ferreiro es uno de los afectados por el corte del camino.

El músico Amaro Ferreiro es uno de los afectados por el corte del camino. / Marta G. Brea

Amaro Ferreiro, uno de los afectados

Entre los más perjudicados por el corte del vial se encuentra el músico Amaro Ferreiro, “un vecino más”, deja claro, en esta especie de Fuenteovejuna nigranesa. El tramo cerrado del vial bordea le obliga a dar un rodeo para acceder a su casa, además de alterar los límites de su propiedad. Pero lo que más preocupa al artista es que se trastoque “la configuración de un barrio tradicional como este, porque este camino lo vertebra”, subraya. Por ello también prevé tomar medidas judiciales.

Los afectados denuncian además irregularidades en la obra como la “retirada de un muro histórico”, el que delimitaba el camino, y la ampliación de otro “sobrepasando a altura permitida”. Los técnicos municipales comprobarán si los trabajos marchan conforme a la legalidad y, si se incumple alguna normativa, “ordenarase paralizar os traballos e darase aviso á Dirección Xeral de Patrimonio”, apunta el alcalde.

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