El hotel del faro de Silleiro abrirá en junio con 16 habitaciones

El emblemático edificio que celebra este año su centenario dispondrá de restaurante

Cumple los cien este año y lo celebrará en junio con la apertura de un hotel en las que fueron viviendas de los fareros. Al faro de cabo Silleiro le quedan cinco meses de obras por delante para inaugurar el hospedaje de lujo, según confirmó ayer José Manuel Blanco, portavoz de la sociedad que lo promueve, Lighthouse Baiona, en un acto en el propio edificio al que asistió el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda. Abrirá con 16 habitaciones repartidas en dos plantas y un restaurante en pleno Camiño Portugués da Costa a su paso por Baiona.

La sociedad que remodelará el faro y gestionará el hotel iniciará de inmediato los trabajos, contratados a la constructora y promotora inmobiliaria Di Milano, tras recibir en los últimos días la licencia municipal, último trámite pendiente desde que el Gobierno central autorizó el uso hotelero del inmueble en noviembre.

Promotores del proyecto con el presidente de la Xunta, el alcalde y la vicepresidenta de la Diputación, ayer.

Promotores del proyecto con el presidente de la Xunta, el alcalde y la vicepresidenta de la Diputación, ayer. / Alba Villar

El arquitecto que ha diseñado el proyecto, Pedro de la Puente, explicó la distribución de espacios: siete habitaciones y restaurante en la planta baja y los nueve dormitorios restantes en la superior. Todo ello funcionará paralelamente a la lámpara que guía las embarcaciones en la entrada a la ría de Vigo, que continuará activa como hasta ahora desde hace cien años.

El proyecto plantea recuperar el antiguo faro junto al mar como tapería

Inauguración en 1924

Fue en 1924 cuando se inauguró la linterna, que sustituía entonces a solo unos metros a la anterior, que servía de referencia al sector marítimo desde hacía 48 años, lo que ahora conocido como “faro vello”, que Lighthouse Baiona también prevé rehabilitar como tapería/cafetería. El proyecto se demorará más tiempo en este caso con toda probabilidad, dado que el inmueble se encuentra en ruinas y ha perdido incluso la torre lumínica, pero la sociedad impulsora espera agilizarlo, dado que dará servicio a los peregrinos del Camiño Portugués a Costa, cada vez más.

El viejo faro, anterior al que se transforma en hotel, en ruinas.

El viejo faro, anterior al que se transforma en hotel, en ruinas. / Alba Villar

El titular del Ejecutivo gallego felicitó a los impulsores de la iniciativa por su apuesta por la excelencia turística y aprovechó para exigir al Gobierno central que permita abrir establecimientos similares en otros puntos de la costa gallega. Agradeció incluso una noticia como la creación de un hotel después de unas semana en la que, lamentó, “se tiraron tantas pedras” contra el sector turístico y el pesquero con el asunto de los pélets.

Por su parte, el alcalde de Baiona, Jesús Vázquez Almuiña, calificó el de hoy como un “día muy importante” para la localidad tras casi veinte años a vueltas con el proyecto. Recordó que el Concello de Baiona propuso ya en 2005 la creación de un albergue a la Autoridad Portuaria de Vigo sin éxito. Fue más tarde, en la etapa de Enrique López Veiga, destacó, y también en la suya al frente del Puerto vigués, cuando se avanzó en la tramitación del “ambicioso” proyecto que contribuirá a la transformación de un enclave único –que fue vertedero de basura y que hoy también alberga la depuradora y un espacio de esparcimiento como la conocida playa de los cristales–, que espera se complete con la recuperación de las baterías militares.