El conflicto del percebe en Baiona ya no sólo se ciñe al debate interno entre los miembros de la agrupación: los que defienden la jornada extracción específica de crustáceo de baja calidad para vendérselo a la sociedad Mar de Silleiro a 9 euros el kilo para la fabricación de paté y los que consideran que perderían dinero con esa marea, ya que el mismo producto supera los 20 euros en lonja cualquier día. Los mayoristas de marisco también salen a defender sus negocios y se suman a la reivindicación de la mayor parte de los trabajadores del sector. José Cabado Castro y Ángel Comesaña Abalde, dos de los compradores de percebe habituales en la lonja baionesa, inciden en la "baja calidad generalizada" del crustáceo en Baiona en los últimos años y creen "injusto" tener que pagar más en la subasta libre que una empresa privada que busca beneficio económico, por mucho que integre a 27 percebeiros, 25 baioneses y 2 de A Guarda.

Por ello, han decidido tomar medidas y se han dirigido por escrito a la Consellería do Mar para solicitar una jornada de extracción específica en las mismas condiciones que Mar de Silleiro. Reclaman percebe de baja calidad, pero suben 25 céntimos la oferta de la sociedad limitada y proponen pagarlo a 9,25 euros el kilo.

Ambos llevan más de veinte años pujando por el percebe en la lonja baionesa y dan empleo a otras cinco personas. La intención de Mar de Silleiro de adquirir 700 kilos a precio pactado les parece un "acto claro de competencia desleal". "Lo hemos consultado con nuestros abogados y consideran que estaría fuera de la ley", recalcan. En su escrito a la Xunta lo dejan claro. "Debido a que la concesión de una jornada de extracción específica de percebe para la elaboración de paté a la empresa Mar de Silleiro S.L. nos perjudica directamente, atentando gravemente contra los legítimos intereses económicos de nuestras empresas, empleados y familias, ya que nos dejaría sin trabajo, solicitamos un trato igual que a dicha empresa beneficiaria de esa extracción en exclusiva", argumentan.

Insisten en que la calidad del percebe baionés ha caído en los últimos años por la sobreexplotación del recurso. Así, se ven obligados a recurrir a puertos del norte de A Coruña para conseguir el tamaño que demandan algunos de sus clientes. En sus cámaras guardan crustáceo adquirido en lonjas coruñesas y lo comparan con el de Baiona. La imagen resulta irrefutable.