Benítez apuesta por Marchesín para Sestao y se queda sin Carlos Domínguez por lesión

“Tenemos que ir a ganar cada partido”, proclama el técnico del Celta ante la cita copera de mañana en Las Llanas

Rafa Benítez, esta mañana en las instalaciones de Afouteza

Rafa Benítez, esta mañana en las instalaciones de Afouteza / Ricardo Grobas

R. V.

El Celta intenta superar la última desilusión en LaLiga tras su empate ante el Cádiz, que el lunes jugó una hora con diez y arrancó un valioso empate que mantiene a los célticos en la zona de descenso por octava jornada consecutiva. Sin apenas tiempo para recuperarse de un nuevo golpe anímico, el equipo que dirige Rafa Benítez ultima la preparación de la segunda ronda de la Copa del Rey que mañana le llevará a Sestao para enfrentarse al antepenúltimo de la Primera RFEF (Las Llanas, 21 horas).

Benítez desveló esta mañana en rueda de prensa que Agustín Marchesín será el portero titular del Celta y que no podrá contar con Carlos Domínguez por los problemas físicos que sufre el canterano. El once inicial estará plagado de jugadores que apenas cuentan con minutos en LaLiga, como Douvikas, Cervi, Dotor, Sotelo, Miguel Rodríguez y Williot Swedberg.

Benítez quiere premiar el gran esfuerzo y sacrificio de Marchesín para acelerar su proceso de recuperación de la rotura del tendón de Aquiles que sufrió a principios de año. El guardameta argentino privará de la titularidad en esta ocasión a un Iván Villar que regresó a la suplencia después de su expulsión ante el Atlético de Madrid, circunstancia que Benítez aprovechó para darle los galones al veterano Vicente Guaita. “Marchesín se lesionó y trabajó durísimo para estar ahí. Merece ese premio”, dijo Benítez.

El entrenador del Celta expresó la obligación del equipo vigués de buscar la victoria en una competición que ahora podría estorbarle por sus problemas en LaLiga. “Tenemos que ir a ganar cada partido”, subrayó Benítez, “con los medios que tienes y consciente del momento del equipo”. Además de los escasos recursos que le quedan para el eje de la zaga (Aidoo y Domínguez están lesionados), al entrenador céltico le preocupa el estado del terreno de juego de Las Llanas, un estadio de muy buenos recuerdos para el club vigués porque allí logró en 1987 el ascenso a la Primera División.

La visita también será especial para Unai Núñez, pues el defensa céltico nació en esa localidad vizcaína a la que el equipo vigués se trasladará mañana. “Está resbaladizo y pesado y eso va a condicionar el juego. Ellos juegan un tipo de fútbol para el que les puede venir bien y nos vamos a tener que adaptar”, subrayó el preparador céltico sobre un campo en el que el Celta tendrá que acostumbrarse al juego aéreo y directo. A pesar de los inconvenientes, Benítez quiere que su equipo tenga claro el objetivo: “Ir allí pensando en ganar” y para ello anuncia “sacar un equipo con jugadores que pensamos que tienen más nivel que el rival”, que hace unas semanas ganó por la mínima a un Celta Fortuna que ocupa la segunda plaza en la misma categoría que el Sestao.

Desilusión

El Celta aborda esta eliminatoria a partido único tras el tropiezo ante el Cádiz. “Estamos desilusionados después de este partido, pero con muchas ganas y la convicción de que este es el camino. Somos el cuarto equipo que más tira a puerta”, subrayó Benítez en referencia al empate del lunes, en el que volvió a lamentar aspectos del juego de su equipo: “No me gustó la circulación, tenía que ser más rápida y llegar a la línea de fondo para sacar mejores centros. Con 26 tiros a puerta ante el Cádiz es un buen balance, pero que no ganes con esos 26 lanzamientos te lleva a la desilusión y la sensación de qué pasa. Pero me quedo con lo positivo: el equipo lo hace bien en Bilbao y en Valencia. Juegas en casa y te vas con una sensación de desasosiego porque creas ocasiones para ganar. Además, somos el cuarto equipo que más tira a puerta”.

Benítez, durante la rueda de prensa de este miércoles

Benítez, durante la rueda de prensa de este miércoles / Ricardo Grobas

Aunque protagonice con el Celta el peor arranque de curso en las 58 temporadas del club en Primera División, Benítez se siente respaldado por el club y no teme por su destitución porque se le contrató para un proyecto de largo recorrido, por tres años. “Todos estamos con la misma sensación de que estamos cerca y tenemos que conseguir esa victoria. Nadie duda del trabajo y de la metodología. Falta ese pasito. Los proyectos en el fútbol duran lo que duran los resultados. Es una situación complicada, pero no la más difícil que he vivido en mi carrera deportiva porque hay tanto apoyo en el entorno que seguro que se van a solucionar las cosas. Aquí todo el mundo quiere apoyar y el público se portó sensacional también en este partido” contra el Cádiz”, aseguró un Benítez que resta importancia a que Luis Campos no acompañe al equipo en estos complicados momentos. “Hablo con Juanki (Juan Carlos Calero) todos los días, con mucha frecuencia. Aunque Luis no esté aquí, tengo su apoyo y me manda mensajes”, dijo.