Este año la "guerra de la mejilla" se libra en los despachos

El TSXG avaló el establecimiento de zonas de percebe y de cría que propuso Mar

Algunas entidades bateeiras van a presentar recurso

Manuel Méndez

Manuel Méndez

Aunque este año no hay problemas con la mejilla, ya que es abundante y de calidad, los bateeiros gallegos anuncian recursos contra la sentencia del Tribunal Superior de Xusticia de Galicia (TSXG) que avala los criterios de la Xunta para regular la explotación de mejilla.

En su día, diferentes agrupaciones de productores y alguna que otra cofradía de pescadores demandaron a la Xunta y a distintos pósitos pidiendo la nulidad de la Orden de 22 de diciembre de 2021 por la que se aprueban los planes de gestión para algas y recursos específicos como el percebe para el trienio 2022-2024.

Aquella contestada Orden era la que establecía las zonas de extracción de percebe y limitaba las destinadas a la recolección de semilla o cría de mejillón, propiciando los peores altercados de los últimos tiempos en lo que se ha dado en llamar “guerra de la mejilla”.

Dió la razón a Mar

Lo que sucedió fue que el TSXG falló a favor de la Consellería do Mar, dándole la razón en lo referido a delimitación de zonas de trabajo y, a la postre, avalando los criterios que habían marcado la exconselleira do Mar, Rosa Quintana, y todo su equipo.

Lo que hizo la sala fue desestimar recursos como los presentados por entidades como la sociedad cooperativa de bateeiros Amegrove, la Federación de Asociacións de Mexilloeiros (Femex) y la Asociación de Mejilloneros Gallegos (Amegal).

Voto particular

Ahora, como queda dicho, el sector se dispone a recurrir esas desestimaciones, y lo hará, básicamente, aferrándose al voto particular emitido por el magistrado Julio César Díaz Casales.

En el mismo hace constar que una supuesta “omisión de trámite de consulta previa al sector”, destacando que “la diferenciación del trámite de consulta y el de información pública determina que el hecho de que la orden fuera colgada en el portal de transparencia no subsana la falta de consulta, con independencia de que otras asociaciones del sector mejillonero hubieran presentado alegaciones en dicho trámite”.

Un voto particular, por cierto, en el que se cita un informe pericial que acredita “el incremento de la exportación de mejillón a Europa en los últimos años” adecuando la producción “a los gustos de los europeos”.

"Lacasito"

Lo cual es tanto como decir que se comercializa “un mejillón más pequeño” –el “lacasito”–, resultando evidente, “aunque en su declaración Tubío Lorenzo (testigo y bateeiro) se negó a reconocerlo, que si se comercializa mejillón de menor tamaño se acorta el tiempo que ha de permanecer en las bateas, lo que conlleva que se incremente la demanda de semilla de mejillón para atender las demandas y mantener el ciclo productivo”.

Una mecánica ésta “que sin duda, aumenta exponencialmente el daño potencial a las colonias de percebe”, asume el magistrado Julio César Díaz Casales.

Al margen de este voto particular, hay que decir que en las diferentes sentencias emitidas rechazando los recursos interpuestos y, por tanto, avalando la decisión de la Consellería do Mar, el TSXG hace constar que “la necesidad de que los planes de gestión del percebe delimiten zonas de aprovechamiento exclusivo del recurso, en las que no se podrá extraer percebe (ZEP), y zonas de reserva para la extracción de mejilla (ZEM), resulta debidamente motivada”.

Coexistencia

Y lo está, “en función de la acreditada coexistencia de ambos recursos naturales en muchos tramos de costa; y en función de la propia metodología reglamentariamente establecida para la extracción de la semilla de mejillón, que se ha acreditado que implica una importante afectación negativa para la pervivencia del percebe”.

La "guerra de la mejilla" sube el tono y comienzan las anunciadas movilizaciones

Manuel Méndez

Otra de las reflexiones que llama la atención de las sentencias emitidas es la referida a la elaboración de los estudios previos para determinar las zonas de percebe y las de mejilla, pues en su momento los bateeiros acusaron a la Xunta de usar datos desactualizados.

Los datos que hay

A este respecto, el TSXG viene a decir que si los datos sobre la mayor o menor abundancia de cría no eran del todo correctos, se debe a que el sector mejillonero no habría informado convenientemente sobre las zonas de trabajo en los años precedentes.

La sala esgrime: “Se afirma que no se puede prescindir de datos directos y reales sobre la distribución de esos recursos y sobre su extracción en tramos determinados de costa, y se critica la utilización de cartografías elaboradas hace más de 15 años, pero esos datos directos y reales no están a disposición de la Consellería y no existe un sistema de tratamiento de datos concreto y fiable”.

"Nos vamos a matar", claman los bateeiros que recogen mejilla

Manuel Méndez

Esto permite recordar que el artículo 31 del Decreto 406/1996 establece que los concesionarios de las bateas están obligados a remitir a la Consellería do Mar “todos los datos estadísticos”.

Sin embargo, hay dudas sobre la “suficiencia, fiabilidad y concreción de los datos suministrados y la posibilidad efectiva de su empleo” para, por ejemplo, establecer “santuarios” de mejilla.

Datos históricos

El TSXG incluso alude a un informe pericial en el que “solo se pone de relieve que no se ha prestado atención suficiente a la importancia de acreditar ante la Xunta datos históricos” referidos a la recolección de la mejilla estableciendo “áreas y cantidades”, como indica el artículo 6 de la Orden de 26 de octubre de 2000.

Dicho de otro modo, que no se han aportado por los mejilloneros “datos actualizados sobre la extracción de mejilla y su localización que pongan de manifiesto la falta de idoneidad de la metodología empleada” por la Xunta al acotar zonas de cría y otras de percebe.

De ahí que llegue a decirse en el fallo que “no se dispone de otro tipo de datos que los utilizados” para elaborar el mapa de zonas de percebe y/o mejilla, no siendo imputable esa deficiencia en los datos no a la Administración, sino a “las entidades del sector mejillonero, obligadas a proporcionarlos, y que no pueden ampararse en las deficiencias o falta de concreción de sus declaraciones para verse relevadas de cualquier tipo de restricción a la hora de realizar la extracción de mejilla, dejando completamente desprotegido al otro recurso coexistente en el mismo espacio”, el percebe.

Protección del percebe

A lo que se añade que “no se puede reprochar a los planes de gestión del percebe que no prevean cautelas de protección de la semilla de mejillón, porque este no es su objeto de regulación, sino la protección y explotación del percebe”.

No se ha acreditado la especial intensidad del perjuicio al sector productivo del mejillón por la previsión de zonas de percebe (ZEP), y en cambio sí se ha acreditado la especial intensidad del perjuicio al percebe en caso de no excluirse las operaciones de extracción de mejilla en esas zonas

Por el contrario, “lo acreditado es la afectación negativa en la extracción de la semilla de mejillón respecto al percebe”.

A mayor abundamiento, “es incuestionable que la mejilla y el percebe están presentes en el intermareal”, existiendo zonas en las que hay exclusivamente una u otra especie y “zonas donde coexisten y comparten espacio y alimento”.

Otras medidas

Al hilo de esto se pone sobre la mesa otro de los argumentos manejados por el TSXG, como es que “el hecho de que existan factores negativos para la explotación del percebe como el furtivismo no enerva en efecto negativo del raspado de la mejilla en zonas coincidentes con el percebe, y del mismo modo que se toman medidas para disminuir el furtivismo, es esperable que la administración aplique normas que contribuyan a contener la afección provocada por esos raspados, que de seguir produciéndose van a privar de eficacia a otro tipo de medidas, como las vedas o descansos obligatorios”.

Por otra parte, “no se ha acreditado la especial intensidad del perjuicio al sector productivo del mejillón por la previsión de zonas de percebe (ZEP), y en cambio sí se ha acreditado la especial intensidad del perjuicio al percebe en caso de no excluirse las operaciones de extracción de mejilla en esas zonas”.

En definitiva, que “no se acredita un perjuicio desproporcionado” a los bateeiros en relación a las necesidades de protección del percebe, limitándose entidades demandantes como Femex “a un cuestionamiento genérico de la metodología empleada” por la Xunta, pero “sin aportar datos alternativos concretos que pongan de manifiesto la no necesidad de delimitación de concretos tramos ZEP”.

Reconocen la posibilidad de encontrar cría de otra forma

Uno de los datos a tener en cuenta al analizar las sentencias del TSXG es que si bien “es cierto que los mejilloneros necesitan semilla de mejillón para sus explotaciones, ésta puede proceder no solo de bancos naturales”, sino también de las cuerdas colectoras de las bateas “y de criaderos o hatchery”.

En relación con esto, un conocido testigo con “interés directo en el asunto, como productor de mejillón e integrante de una de las asociaciones que recurrió la Orden aprobatoria de los planes de gestión, corroboró en su declaración que los bateeiros pueden ir a recoger la mejilla por toda la costa”.

Lo que ocurre es que “al verse impedidos de acudir a determinadas zonas que venían explotando”, como son las excluidas por los planes del percebe, “tienen que acudir a otras, que pueden estar más alejadas y no ser las habituales de trabajo, o que pueden estar más concurridas a los efectos de la explotación o ser de más difícil acceso o menos conocidas para los bateeiros”, reflexiona el TSXG.

“Pero de su testimonio no se deduce que estas restricciones impliquen que el sector no se vaya a poder abastecer de la mejilla necesaria para mantener la producción, sobre todo si se tiene en cuenta que confirmó la posibilidad de abastecerse de mejilla a partir de las cuerdas colectoras de las bateas”.

Suscríbete para seguir leyendo