La mortandad de marisco encarece la almeja hasta un 90% con respecto al año pasado

Los precios son más altos, pero el sector en su conjunto factura mucho menos dinero | La almeja fina se está pagando en Carril a una media superior a los 43 euros el kilo

Mariscadoras en Cambados.

Mariscadoras en Cambados. / Iñaki Abella

La fuerte crisis productiva que están padeciendo este año numerosas agrupaciones de marisqueo de toda Galicia, entre ellas algunas de Arousa, ha provocado que los precios de las distintas variedades de almeja se hayan disparado en la lonja y, en consecuencia, en los mercados finales. A modo de ejemplo, entre el 15 y el 30 de noviembre de 2022 se subastaron en las lonjas de Galicia 13.800 kilos de almeja fina, con una cotización media de 29 euros el kilo y una máxima de 77. Los datos del mismo periodo de este 2023 son muy diferentes.

A falta de que se contabilicen las subastas de algunas Cofradías que todavía no han remitido sus datos al portal de Pesca de Galicia, se han vendido en las rulas gallegas unos 5.000 kilos de almeja fina (menos de la mitad que hace un año), y los precios han sido mucho más elevados. La cotización media de esta variedad ha subido hasta los 49,4 euros el kilo, y en la última quincena del pasado mes se llegaron a pagar por un kilo de almeja fina 116 euros.

El mes de octubre y las primeras semanas de noviembre han sido tan lluviosos que provocaron episodios de mortandad masiva en varios bancos marisqueros. Esto, unido a otras circunstancias, ha supuesto una caída muy considerable en la producción. En la cadena de comercialización esto ha tenido dos consecuencias directas: el fuerte encarecimiento del producto gallego, avalado por el aura de calidad y sabor; y la entrada de grandes cantidades de almeja procedente de otros países, como Portugal o Marruecos, para abastecer la demanda a precios algo más contenidos.

Los precios se han disparado incluso en aquellas lonjas donde, por una razón u otra, se ha notado menos la merma productiva. En algunos casos, la cotización media de algunas variedades de almeja casi se ha duplicado con respecto a 2022, con subidas porcentuales del 90 por ciento.

En la lonja de Vilanova, por ejemplo, la almeja babosa se pagó en la segunda quincena de noviembre a una media de 23,7 euros el kilo, frente a los 15,8 del mismo periodo de hace un año. En la de Carril, el precio medio de la almeja fina ha sido de 43,5 euros el kilo en los últimos días, frente a los 24 del mismo periodo de 2022. Y en Cambados, la japónica se cotiza ahora a 22 euros, cinco más que hace un año.

Pero estos buenos precios no implican que el sector del marisqueo esté ganando más dinero. Muy al contrario, el sector en su conjunto está facturando mucho menos que en 2022. En Galicia, las ventas de almeja fina generaron en la segunda quincena de noviembre del año pasado algo más de 402.000 euros. Este año, no llegan ni a los 230.000.

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