Nécora y pulpo, ¿la decepción del verano?

Una vez más, la subida de precios que afecta a todo tipo de artículos y, de manera muy especial, a los productos de alimentación, sirve de “consuelo” para la flota pesquera gallega.

Gracias al incremento de cotizaciones en las lonjas gallegas, el sector compensa, al menos en parte, el descenso de volumen experimentado en los puertos.

Apreciable este verano con especies como la nécora y el pulpo, que regresaban a las “rulas” a principios de julio, tras superar sendas vedas, y completan tres meses teóricamente “potentes” con un considerable descenso de volumen respecto a ejercicios precedentes.

El crustáceo

Gracias a la citada subida de precios, el crustáceo aludido permitió facturar algo más de un millón de euros en el último trimestre, que es prácticamente lo mismo que se había facturado en julio, agosto y septiembre de 2022, 2021, 2020 y 2019.

Dicho de otro modo, que la nécora mantiene cierta estabilidad económica durante el último lustro –pandemia incluida– gracias a esa subida de precios que, aún beneficiando al sector, perjudica al conjunto de los consumidores.

El problema es que las lonjas gallegas logran ese millón de euros después de subastar “solo” 52 toneladas de nécora, que ayer se vendía en la plaza de abastos de Vilagarcía a 25, 30, 40 y 45 euros, dependiendo del tamaño.

De ahí la preocupación de los propios pescadores, ya que ese volumen está por debajo de las 64 toneladas del mismo periodo del año pasado, de las 62 de 2021 y, desde luego, a mucha distancia de las 76 toneladas de nécora comercializadas en el referido trimestre de 2020, cuando más podían hacerse notar los efectos del coronavirus en sectores como el hostelero.

Cefalópodo

Con el pulpo, que ayer se despachaba en el mercado vilagarciano a 15 y 16 euros, el descenso es incluso más acentuado.

Según los datos provisionales aportados desde los puertos a la plataforma Pesca de Galicia, entre julio, agosto y septiembre se subastaron 392 toneladas de este cefalópodo; muy por debajo de las 598 toneladas despachadas en el mismo periodo de 2022 y de las 522 toneladas que se comercializaron en verano de 2021.

Consellería do Mar

Las cifras que maneja la Consellería do Mar, hay que insistir, son todavía provisionales y pueden incrementarse en cuanto se sumen las operaciones de primera venta realizadas en los últimos días en diferentes lonjas.

Pero aún así, por mucho que se sumen los últimos ingresos a los 3,8 millones de euros facturados por el pulpo desde principios de julio, parece ciertamente complicado alcanzar los 5,4 millones que generó esta especie en 2022, e incluso los 5 millones de 2021.

Esto es tanto como decir que ni siquiera la subida de precios ayuda a compensar la caída de producción de pulpo, de ahí que sigan barajándose todo tipo de medidas a tomar para propiciar la recuperación de la especie, tales como aumentar los días de veda o variar la época del año en la que se aplica.

En cuanto a lo que han dado de sí los dos recursos en cada puerto de Galicia, pueden citarse, a continuación, algunos de los más importantes.

¿Afecta el cambio climático al pulpo gallego?

Puerto a puerto

En el caso de la nécora, desde el pasado mes de julio se vendieron 11 toneladas en A Coruña (164.000 euros), 8 en Vigo (189.000 euros), 7 en Ribeira (135.000) y más de 5 toneladas en O Grove (170.000 euros).

Así como 2,7 tonelada en la lonja de Cangas (76.000 euros), 2 en Burela y en Camariñas, 1,6 toneladas en Muros, 1,4 en Marín y algo más de una tonelada tanto en Cambados como en Vilanova.

Con el pulpo destacan la lonja de Ribeira (89 toneladas), la de Vigo (57), A Coruña (54), Bueu (31 toneladas), Corcubión (18), Cangas y Muros, con 17 toneladas en cada caso, Malpica y Portonovo, con 13 en cada puerto, O Grove (9) y tanto Porto do Son como Burela y Carnota (Lira), con 7 toneladas de pulpo en cada “rula”.

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