El escenas de dolor se repitieron durante toda la tarde en el tanatorio redondelano de Tanamañó, al que acudieron cientos de personas, la mayoría jóvenes compañeros de instituto y de los equipos de fútbol en los que jugaban, para despedir a Sofía Pérez y Bieito Lovera, mientras que el velatorio de Sara Cal se realizó en el tanatorio San Mauro de Pontevedra. Los tres jóvenes eran muy queridos en Redondela, donde formaban una pandilla junto a numerosos chavales de su generación -entre los que también se encuentran los dos heridos- tras años de estudios juntos y compartir aficiones comunes, sobre todo el fútbol, en distintos equipos como el CD Choco, el Nespereira CF, el Cidade de Pontevedra y el Poio-Pescamar.
Los asistentes al tanatorio contaron en todo momento con el apoyo de un equipo de psicólogos de Cruz Roja y de numerosos voluntarios de Protección Civil. También el alcalde en funciones de Redondela, Javier Bas, y varios concejales acudieron a arropar a las familias. El propio regidor se encontraba muy afectado puesto que el padre del joven Bieito, Agustín Lovera Bas, es su primo.
La Junta de Portavoces del gobierno de Redondela, ante esta tragedia que conmovió a todos los vecinos, acordó decretar luto oficial en el Concello durante dos días. Las banderas de los edificios municipales permanecían a media asta y con crespones negros, y se suspendieron todas las actividades organizadas por el Ayuntamiento, en cualquiera de sus áreas, así como los actos que salgan del normal funcionamiento de los servicios a la ciudadanía. Asimismo, la corporación municipal trasladó sus condolencias a los familiares y amigos de los fallecidos.
El alcalde de Pazos de Borbén, Andrés Iglesias, también expresó ayer sus condolencias por las víctimas mortales del accidente. Uno de los jóvenes que perdieron la vida, Bieito Lovera, residía desde hace años en el municipio pacense, en la parroquia de Nespereira. Iglesias, que desde primera hora se puso a disposición de la familia, lamentó la magnitud de la tragedia para sus vecinos y para toda la comarca. "Con esa edad, con toda la vida por delante, es una desgracia que nos conmueve y nos entristece a todos", declaró Iglesias.
El regidor de Soutomaior, Agustín Reguera, también expresó sus condolencias envió un "sentimiento de apoyo" a todos los familiares y afectados por el accidente, entre los que se encuentran vecinos de Soutomaior. "Me pongo a su disposición para todo lo que necesiten y para ayudarles en todo lo necesario en estos momentos tan duros", indicó el edil, que destacó que "ver como se pierden tres vidas tan jóvenes y llenas de futuro es una desgracia y una tragedia para toda la comarca".
Por último, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, y la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, se sumaron a las muestras de pésame y envió por fax sus condolencias a Javier Bas, así como un mensaje de apoyo a los dos supervivientes del accidente.
