La terapia contra la hepatitis vírica podría eliminar el mieloma múltiple

Investigadores españoles afirman que los virus de la hepatitis B y C son una de las causas de este cáncer, lo que abre nuevas vías de tratamiento

Los virus que provocan la hepatitis B y C podrían ser la causa –o al menos, una de ellas– del mieloma múltiple (MM) y eliminar esta infección, la vía para combatir muchos casos de este tipo de cáncer de la sangre, que comienza en las células plasmáticas en la médula ósea. Ésta es una de las conclusiones de la investigación del grupo de Joaquín Martínez, de la Unidad de Investigación Clínica de Tumores Hematológicos, una colaboración del Hospital 12 de Octubre (H12O) de Madrid y el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO).

Según la doctora Carmen Albo, jefa del Servicio de Hematología del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (CHUVI), este hallazgo abre una “puerta muy importante para conocer las posibles causas de aparición de estas enfermedades”. “Ya existen otras enfermedades hematológicas en las que se ha encontrado asociación con infecciones crónicas como en algún tipo de linfoma”, detalla.

Hace unos años la curación de un paciente de mieloma múltiple tras haber sido tratado de una hepatitis C sorprendió a los investigadores. María Linares y Alba Rodríguez-García, investigadoras del H12O-CNIO y de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), decidieron estudiar la curación de este paciente con hepatitis, para lo que recurrieron a la teoría que atribuye la causa del mieloma múltiple a la exposición crónica del organismo a un agente infeccioso.

El MM, uno de los cánceres de la sangre más frecuentes, consiste en una proliferación excesiva de las células de la sangre que generan los anticuerpos (también llamados inmunoglobulinas), las proteínas que defienden al organismo de infecciones. En el mieloma, un determinando anticuerpo –distinto en cada caso, en función del agente infeccioso– es producido de manera continua y excesiva. Una teoría propone que esta anomalía se debe a la exposición crónica al agente infeccioso, que altera las señales bioquímicas implicadas en la producción del anticuerpo específico. La curación del paciente con mieloma y hepatitis C tras haber sido tratado de esta enfermedad infecciosa parece apoyar esa teoría.

Se desconoce qué causa el MM, y aunque se sospecha hace tiempo que tiene relación con patógenos infecciosos, nunca se había comprobado esta conexión. El hallazgo, realizado en colaboración con Sylvie Hermouet, de la Universidad de Nantes, ha merecido un reciente editorial en la revista “Haematologica”. “El reconocimiento de esta asociación entre la hepatitis vírica y el mieloma múltiple, así como con las patologías que anteceden a la aparición del mieloma (las gammapatías monoclonales), tiene importantes implicaciones clínicas”, señala el artículo, que añade: “La asociación entre la hepatitis vírica y el desarrollo de mieloma múltiple y otras gammapatías monoclonales se ha convertido en un importante campo de investigación. Las infecciones crónicas por el virus de las hepatitis B o de la hepatitis C contribuyen a la patogénesis de estas neoplasias hematológicas, lo que justifica un aumento de las estrategias de concienciación, detección y tratamiento”.

Asimismo, subraya que identificar precozmente una infección por el virus de hepatitis B o C en estos individuos puede conducir al tratamiento antiviral adecuado y la consiguiente mejora de los resultados.