El sector turístico arousano confía en que esta sea una buena Semana Santa en cuanto a ocupación. La mejoría del tiempo, que se concretó ya ayer con una jornada prácticamente soleada de principio a fin, frenó en primer lugar las cancelaciones que se produjeron entre el lunes y el martes, y animó por otro lado a los viajeros más indecisos que estuvieron pendientes hasta última hora de las predicciones meteorológicas.

El patronato de turismo Rías Baixas, que depende de la Diputación de Pontevedra, estimó que la ocupación media en la provincia será durante esta campaña de un 75 por ciento. Esta cifra concuerda con la de algunos hosteleros consultados esta semana por FARO.

No obstante, en el caso concreto de O Salnés, el nivel de ocupación podría ser ligeramente más alto, habida cuenta de que hay varios establecimientos que están llenos para las noches del Viernes Santo y el sábado.

Para los hosteleros, la campaña de Semana Santa está muy relacionada con la meteorología. De hecho, cuando el lunes las agencias anunciaron la llegada de un frente frío a Galicia entre el miércoles y el Jueves Santo, algunos establecimientos sufrieron las primeras cancelaciones.

No obstante, el martes las previsiones ya cambiaron ligeramente, y apuntaban a una mejoría de la situación a partir del Viernes Santo. Eso frenó las cancelaciones, y animó de nuevo las reservas. Finalmente, el buen tiempo parece que acompañará durante todo el fin de semana a los viajeros que hayan escogido O Salnés para pasar este puente vacacional.

Días calurosos

De hecho, se espera que tanto el sábado como el domingo sean días relativamente calurosos, con temperaturas que podrían superar los 23 grados centígrados en Vilagarcía.

Los más atrevidos quizás se animen a probar el agua en las playas. Los demás podrán disfrutar de otros de los puntos fuertes de O Salnés, como son su gastronomía, su patrimonio o sus espacios naturales, con senderos homologados en O Grove, Vilanova y Ribadumia.