Periodismo local e internacional para abrir la VII edición del foro As Mulleres que Opinan son Perigosas

Periodismo objetivo y con perspectiva de género. Es posible y lo llevan haciendo décadas cientos de profesionales mujeres del sector en todo el país. Siempre que pueden, siempre que les dejan. Esta fue una de las ideas que ayer se expusieron en el Teatro Principal de Pontevedra durante la inauguración de la séptima edición del encuentro de mujeres periodistas “As mulleres que opinan son perigosas”, que continuará hoy sábado con entrada libre hasta completar aforo.

Organizada por las también periodistas Susana Pedreira y Diana López, la cita cuenta con la colaboración de Concello y Diputación de Pontevedra y cada año cita a profesionales de medios de comunicación españoles, teniendo tan presentes los de carácter local como los autonómicos, nacionales o de alcance internacional. El acto de apertura contó con la presencia de la concelleira y la diputada de Igualdade, Anabel Gulías y Sandra Bastos, respectivamente.

Precisamente, inauguraron el turno de intervenciones ayer las dos ganadoras del I Premio de Opinión Mulleres que Opinan, Carmen G. Magdaleno y Carolina Sertal, que leyeron los artículos con los que fueron reconocidas el año pasado y ofrecieron una charla sobre su visión del mundo del periodismo y los problemas que las mujeres, de actuales generaciones y anteriores, se han encontrado, y se seguirán encontrando, en su día a día laboral. Carmen G. Magdaleno centró su discurso en el trabajo de la periodista de TVE Rosa María Calaf, así como en el actual genocidio de Israel contra la población palestina en Gaza, mientras que Carolina Sertal, periodista de FARO, abordó la comunicación a nivel local.

Sertal reconoció que de una forma importante “As mulleres que opinan son perigosas” le había cambiado la vida e hizo un repaso por su propia trayectoria a nivel laboral, así como de las diferentes experiencias con compañeras mujeres y hombres. En este sentido, confesó su preocupación por las nuevas generaciones de periodistas hombres y los nuevos tipos de actitudes machistas que manifiestan, algunas encubiertas y otras no, tanto en su trabajo como con sus compañeras. “De lo que puedo estar orgullosa es que de nos tenemos las unas a las otras”, aseveró, para añadir que: “Es importante ver que hay compañeras que reconocen mi trabajo día a día”.

Para Carolina Sertal, “hace falta que los periódicos incorporen a la editora de Igualdad”, algo que denominó como una “necesidad imperiosa” para salvar el tratamiento de determinados temas, entre los que destacó los de violencia de género.

Frente a los “techos de hormigón y las paredes de ladrillos”, afirmó que “decidí levantar la voz para recordarnos lo que valemos”.

“Ser mujer en una sociedad machista es difícil y feminista no se nace por ciencia infusa”, aseguró, pero consideró que “Sin nuestra mirada, la historia no se contaría como tiene que ser”.

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