Los trastornos alimentarios, un riesgo para más de la mitad de gimnastas acrobáticos

Más de la mitad de las personas que practican gimnasia acrobática presentan riesgo de desarrollar trastornos de conducta alimentaria, según alerta una investigación que ha realizado la exgimnasta Alicia Salas para la Universidad de Vigo.

Este estudio, en el que han participado unos 130 gimnastas federados, tenía como objetivo evaluar el grado de insatisfacción corporal y la existencia de posibles trastornos alimenticios entre los deportistas que compiten en esta disciplina deportiva.

Un 52,6% de los gimnastas consultados, sostiene la autora de esta tesis, corren peligro de acabar teniendo uno de estos trastornos, caracterizados según Salas por “anormalidades” en su comportamiento a la hora de ingerir alimentos para intentar controlar su peso.

La “preocupación excesiva” por el peso o por la alteración de su imagen corporal que la investigadora ha apreciado en la mayoría de los deportistas, tanto masculinos como femeninos, puede tener “impacto” en su salud y derivar en estos desórdenes alimentarios.

Situación “saludable”

Los deportistas que han colaborado en este estudio, con edades comprendidas entre los 9 y los 21 años –56 de ellos participantes en competiciones a nivel internacional– presentaban un índice de masa corporal “saludable” y un bajo porcentaje de grasa corporal.

Pero a la hora de evaluar lo que Alicia Salas denomina “variables psicosociales”, muchos de ellos reconocieron “insatisfacción corporal”, junto con una “obsesión” por la delgadez y comportamientos bulímicos, en mayor medida entre las mujeres.

Fue la propia experiencia de Salas como gimnasta acrobática, deporte en el que compitió hasta los 21 años y con el que llegó a representar a España en el Mundial celebrado en 2012 en Estados Unidos, la que sirvió como punto de partida para esta investigación.

“Tras ver el sufrimiento a mi alrededor y en mi persona de ciertos aspectos que se tratan en esta tesis, me llamaron la atención los factores psicosociales en el deporte”, subraya la autora de este estudio, que considera que hay pocas investigaciones sobre la gimnasia acrobática.

A este respecto, el objetivo de esta tesis no era solo avanzar en el estudio de esta disciplina, sino también proponer recomendaciones para mejorar la salud de los gimnastas.

Entre ellas, Alicia Salas sugiere prestar “especial atención” a la formación de la satisfacción corporal y el conocimiento de los requisitos morfológicos y, por lo tanto, de alimentación que debe tener un deportista en esta disciplina para reducir el riesgo de sufrir trastornos.

Dirigida por la profesora de la Facultad de Ciencias de la Educación y del Deporte Águeda Gutiérrez y la docente de la Universidad de Granada Mercedes Vernetta, la tesis es además la primera investigación sobre la incidencia que podrían tener en este deporte este tipo de trastornos. Como explica Salas, este aspecto ya fue analizado en otras disciplinas gimnásticas, mas no en el caso de la acrobática, donde “sí existen estudios precedentes” sobre la insatisfacción corporal, otro de los aspectos que analiza su trabajo.