Zarpazo al abandono animal

Alumnos de Infantil de Franciscanas recogieron comida y material para la protectora Progape en el marco de un proyecto educativo que apuesta por las prácticas responsables con las mascotas

Infantil se volcó en la aportación de comida para las mascotas de Progape.

Infantil se volcó en la aportación de comida para las mascotas de Progape. / Iñaki Osorio

La concienciación con el bienestar animal y las prácticas responsables en el trato con las mascotas ha pasado de la teoría a la práctica en el colegio Franciscanas de Ourense. Desde hace un año, a las charlas impartidas por veterinarios y voluntarios de las protectoras de perros y gatos o las visitas de perros guía a las aulas dentro del denominado proyecto Zarpas, se ha sumado una parte más activa en la que los alumnos de todas las etapas educativas colaboran aportando recursos a Progape, la asociación que gestiona la protectora de Ourense.

La iniciativa une especialmente a los Ecoviligantes –un grupo de voluntarios del centro muy implicado en actividades a favor del medio ambiente y la sostenibilidad– y al alumnado de 6º de Infantil, que con 5 años ha sido capaz de recaudar en solo cuatro semanas, 40 kilos de comida, cientos de periódicos, mantas, toallas viejas y colchonetas para perros que este lunes llegarán a las instalaciones de Progape.

Alumnos de 1º de ESO muestran parte del material recogido.   | // IÑAKI OSORIO

Alumnos de 1º de ESO muestran parte del material recogido. | // IÑAKI OSORIO / S. DE LA FUENTE

La profesora de Religión y Lenguas, Cristina Bravo, ha coordinado esta acción y no puede estar más orgullosa: “Es material que la protectora necesita un montón y los niños aprenden sobre las necesidades de las protectoras, la importancia de la adopción y la esterilización, y el bienestar animal”, destaca. Además, el proyecto encaja perfectamente con los valores de los Ecovigilantes, que nunca rechazan colaborar con una buena causa. “En el colegio siempre hemos trabajando la concienciación sobre las prácticas responsables con los animales y vimos que era un proyecto en el que podíamos colaborar con ellos”, explica la docente en relación al grupo de voluntarios coordinado por Gonzalo Sánchez Busóns.

Conectados con el entorno

Esta implicación forma parte del aprendizaje por proyectos que desarrolla el centro. “Son iniciativas que se desarrollan dentro de la ciudad porque nos parece importante que los niños vean qué necesidades hay en su entorno”, explica la docente. Faunia es uno de estos proyectos, en los que además de aprender prácticas responsables con los animales, los escolares comprueban que su implicación es muy necesaria en su ciudad.

Suscríbete para seguir leyendo