Del pub al juzgado: dos jóvenes condenados por distintas agresiones en noches de ocio

Los conflictos que derivan en actos violentos en el horario de ocio nocturno repuntaron después del periodo de restricciones que impuso la pandemia. En las últimas semanas, los dos juzgados de lo Penal de Ourense han dictado condenas por casos distintos de agresiones en locales de ocio nocturno, una en la ciudad, otra en O Barco de Valdeorras.

En ambos procedimientos, los autores, dos varones jóvenes, reconocieron los hechos y aceptaron una pena a la baja, con respecto a la petición inicial del fiscal. Ambas sentencias ya son firmes, como todas las que resultan de un acuerdo de conformidad.

La madrugada del 2 de marzo de 2022, sobre la una y media, un ourensano de 31 años de edad, sin antecedentes penales antes de estar implicado en esta causa, se encontraba en las inmediaciones de un pub de O Barco. Inició una discusión con un grupo de personas y, según se considera probado en la sentencia, agredió a una mujer.

La víctima sufrió una fractura del segundo metacarpiano de la mano izquierda, una lesión que le dejó como secuelas rigidez y dolor, así como tres cicatrices. Durante 30 días estuvo impedida para realizar sus ocupaciones habituales.

El autor de la agresión, que admite el delito de lesiones, deberá indemnizar a la víctima con 3.000 euros. El juzgado de lo Penal Número 1 de Ourense accede a que pague la responsabilidad civil en cuotas de 125 euros al mes. Además, la condena impone al acusado el pago de una multa de 1.260 euros.

El otro joven condenado recientemente en la provincia por una agresión en el contexto del ocio nocturno es un ourensano de 21 años que también carecía de antecedentes penales. El delito de lesiones que cometió tuvo lugar la madrugada del 24 de septiembre de 2022, sobre las 5 horas, en las inmediaciones de un pub de la calle Pizarro, en la zona de vinos de la ciudad.

Estaba hablando con otro joven y, de repente, le dio un golpe en la cabeza empleando un vaso de cristal. La víctima sufrió múltiples heridas en el cuero cabelludo. Necesitó que le colocaran grapas. El encausado también admitió este delito y se conformó con una pena de prisión de 3 meses, suspendida con la condición de que no delinca durante dos años. Debe pagar al perjudicado 558 euros, una cantidad que ya depositó.

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