La gran fiesta de Senegal: “Somos felices en Galicia... y mejoramos su natalidad”

Cientos de africanos de confesión musulmana se desplazaron a Ourense para celebrar el nacimiento del profeta en un encuentro con folclore, vestidos y gastronomía de su país

Removiendo una de las grandes potas de comida.

Removiendo una de las grandes potas de comida. / IÑAKI OSORIO

M. J. Álvarez

“En mi país cocinamos muy lento la comida, le ponemos muchos vegetales, especias e, incluso, lo dejamos reposar del día anterior. En España cocinan todo muy rápido. Es otro ritmo”, explica Khady mientras pica, con otro grupo senegalesas, ataviadas con los hermosos y coloristas trajes típicos de su país, kilos de cebolla en una gran tinaja, como base para uno de sus platos tradicionales en el Campo da Feira de Ourense.

Mareme, repartiendo “La”, plato típico de su país. |   // IÑAKI OSORIO

Mareme, repartiendo “La”, plato típico de su país. | // IÑAKI OSORIO / M.J. Álvarez

A su alrededor perolas humeantes, en un auténtico festín para el olfato, por el aroma que desprenden una gastronomía adobada con especies exóticas, en maridaje con la música folclórica de fondo de su país, Senegal.

Mujeres con sus trajes típicos preparando los menús. |   // IÑAKI OSORIO

Mujeres con sus trajes típicos preparando los menús. | // IÑAKI OSORIO / M.J. Álvarez

Ese mismo Campo da Feira que acoge las ferias mensuales del pulpo á feira, fue ayer el lugar de encuentro de cientos de miembros de la comunidad senegalesa en Galicia, en su primera gran fiesta comunitaria para celebrar un día grande en su calendario, el nacimiento del profeta Mohamed. Los actos religiosos tuvieron lugar en las distintas mezquitas repartidas por Galicia días antes, pero ayer, la jornada era de baile y gastronómica.

Asistentes a lacita gastronómica en el Campo da Feira. |   // IÑAKI OSORIO

Asistentes a lacita gastronómica en el Campo da Feira. | // IÑAKI OSORIO / M.J. Álvarez

Por la noche, la gran cita festiva donde hubo un auténtico desfile de trajes típicos de gala y folclore del país senegalés, fue en el Paco Paz. “Esta fiesta que se llama “maouloud nabi”. se celebra en todo el mundo, son dos días festivos pero como coincidió en Galicia en día laboral por eso lo trasladamos al sábado”, indica Ibrahima Diouf, presidente de la Asociación de Senegaleses en Ourense.

Ibrahima lleva 20 años en Ourense, provincia con más de 200 senegaleses censados, de los 5.000 que residen en Galicia. Mareme, su mujer , que repartía ayer afanosamente “La” un sabroso postre de su país, compuesto de una base de maíz y yogur, se considera “feliz en Galicia; nos sentimos integrados y más desde que estamos juntos”.

A la pregunta de si hay racismo, Ibrahima responde con lucidez: “la hay en todo el mundo, también en Senegal. Pero en general sentimos respeto; nos tratan bien nos dan trabajo y nosotros, como inmigrantes ¡mejoramos la natalidad en Galicia!”, exclama.

“Muchos africanos conseguimos trabajo en Coren”

La población senegalesa en Galicia vive una etapa más serena y de menor desarraigo porque “en los últimos años ya estamos aquí toda la a familia y eso hace la vida más fácil” explica Mareme mientras reparte patos de “La”. Ayer, en esas cacerolas gigantes había de todo y por kilos : “cien pollos que hemos comprado para la noche; 26 corderos que están esperando en el horno, mucho pescado que es plato típico en nuestro país. Vendrá gente de Vigo, Santiago Coruña en autobuses. Es la primera vez que nos unimos en Galicia para celebrar la fiesta del profeta” explicaba el presidente del colectivo de senegaleses de Ourense. “Somos un pueblo acostumbrado a trabajar. Antes veníamos solos los hombres con la idea de ganar dinero y enviarlo a casa. Ahora tras la reagrupación familiar estamos todos en familia y trabajamos aquí” explica Ibrahima. Aunque su religión es musulmana, es menos estricta afirma que en otras culturas y “trabajamos hombres y mujeres; ya no nos dedicamos solo a la venta ambulantes y a las ferias, sino que la mayoría en Ourense estamos en empresas de madera, y muchos contratados en Cooperativos Coren. Ahí también están dando empleo a muchas senegalesas”, explica Ibrahima.

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