La 1 emitió el martes 19 de marzo la penúltima entrega de 'Bake Off: Famosos al horno', en la que uno de los cinco concursantes que alcanzaron este último tramo se quedó a las puertas de la final.

Patxi Salinas tuvo que abandonar el programa de repostería en una noche con tres retos muy exigentes. Ana Boyer, Alba Carrillo, Rocío Carrasco y Blas Cantó se convirtieron en los finalistas de la competición.

La gala arrancó con una prueba de autor en la que debían elaborar una tarta de crepes de al menos diez centímetros de alto, decorada y con un relleno elaborado. Al tener que hacer tantas crepes, cada semifinalista contó con la ayuda de un ser querido para esa labor.

Rocío Carrasco se reencontró con su prima Ani, mientras que Alba Carrillo se unió a Lucía Pariente, su madre. Ana Boyer estuvo con Fernando Verdasco, su marido. Blas Cantó recibió a su amiga Adriana Torrebejano, y a Patxi Salinas le echó una mano su cuñada, Olga Santamaría.

El vasco presentó una elaboración "gustativamente rica", aunque con pobre decoración, no así Alba, aunque en su caso, los jueces echaron de menos una salsa. Blas también falló con la estética, mientras que Ana fue muy alabada por el jurado por su gran combinación de sabores, entre ellos el bacon. Rocío hizo, según las valoraciones de los jueces, "tarta perfecta" .

La tarta San Marcos protagonizó la prueba técnica. El bizcocho "muy compacto" de Patxi lo dejó en penúltimo lugar, Blas ocupó el último puesto con una tarta con sabor "a huevo crudo".

Último reto relacionado con el fútbol

La prueba fantasía puso punto final con un esférico de chocolate cuyo interior contenía una mousse, cuatro trufas y pastillas de chocolate con frutos secos (cuatro músicos), además de combinar chocolate blanco, negro y con leche.

Paradójicamente, esta fue la elaboración que decantó defitivamente la balanza hacia Blas Cantó, en detrimento del exfutbolista, que realizó una esfera "muy fea" y bastante gruesa, con varios errores, sobre todo, en los tres elementos del interior: "¡Cómo voy a llegar yo a mi casa y que me digan mis amigos 'No hiciste un balón de fútbol, toda la vida con un balón y no lo has hecho!", se lamentaba el concursante. El vasco acabó siendo el peor valorado tras la cata y se quedó fuera del programa en este penúltimo paso, antes de la final que disputarán sus cuatro compañeros.

El adiós de Patxi Salinas fue muy emotivo, aunque la que más acusó la marcha del hermano de Julio Salinas fue Ana Boyer que se mostró muy afectada ante la eliminación de su compañero: "Me rompe el corazón", asegúro la hija de Isabel Preysler, que tuvo que parar su grabación, al estar a punto de romper a llorar.

Los otros finalistas también se emocionaron al despedirse de él. "He disfrutado como un niño pequeño. He hecho cosas que no me esperaba y me siento orgulloso", declaró el que fuera jugador céltico antes de salir y quitarse el delantal.