Monte Faro busca rebajar el precio para salvar la reconstrucción de la Casa do Local
El colectivo de vecinos de Domaio trabaja para hacer realidad una obra por la que se espera desde hace años | Los comuneros consideran demasiado alto el coste previsto de 450.000 euros
La Asociación de Veciños de Domaio ‘Monte Faro’ celebra este sábado su asamblea general ordinaria, en el local multiusos de la parroquia a las 18.30 horas en primera convocatoria y a las 19.00 horas en segunda convocatoria. La cita servirá para tratar los proyectos realizados y las demandas que tiene la parroquia. Entre ellos ocupará un lugar especial la reconstrucción de la Casa do Local. Y es que los comuneros señalaron en su reciente asamblea que el precio del proyecto básico es demasiado elevado, pues ascendía a 450.759,08 euros. Como consecuencia de ellos, la propia asociación de vecinos está contactando con posibles empresas constructoras para buscar un proyecto de menor coste, con la intención de salvar la idea de recuperar este histórico inmueble vecinal ubicado en el Camiño da Rotea.
El espacio debería tener 137,83 metros cuadrados de superficie, 21 de ellos de porche. Los arquitectos que redactaron el proyecto inicial son Rodrigo Currás y Félix Gómez Pousa. En 2016 fue cuando el Concello accedió a ceder a la Comunidad de Montes de Domaio la denominada Casa do Local, que los vecinos reclamaban desde hacía años y que quieren destinar para su uso por parte de las distintas asociaciones de la parroquia. Del inmueble original solo se podrán levantar las cuatro paredes de la fachada exterior. La pegada al camino debe retranquearse para cumplir con la alineación que marca el nuevo PXOM.
Son por lo tanto ocho años ya de espera desde que comenzó a hablarse de este proyecto.
Este inmueble se inauguró en 1913 con funciones sindicales
La Casa do Local se inauguró el 12 de octubre de 1913 con funciones sindicales. Partió de un decreto real de Alfonso XII promulgado en 1906 para promover estas casas de agricultores y estimular el comercio. Y es que en este inmueble se vendían los excedentes de los productos que cultivaban los vecinos de Domaio después de utilizarlos para su autoconsumo. Además, hasta la Guerra Civil (1936-1939), el espacio acogía distintas actividades como bailes para los jóvenes de la localidad. Durante la propia Guerra y a modo de venganza contra las actividades sindicales previas a la dictadura, la casa fue destrozada en varios puntos.
Esta semana la directiva de Monte Faro tendrá una reunión con el Concello para trasladar al resto de vecinos, en la asamblea del sábado, el estado de otras demandas como la reforma del centro de salud de Domaio que realizarán la Xunta y la administración local para poner fin, de una vez por todas, a las históricas filtraciones de agua del edificio. La colaboración de Monte Faro fue esencial para reactivar la negociación entre ambas administraciones.
Otro de los asuntos por los que esperan es la limpieza de los cursos fluviales que atraviesan la parroquia. El de A Freixa deberá mejorarse en las próximas semanas merced al trabajo de los alumnos del módulo de forestales del Obradoiro de Emprego que se imparte en el Patronato Beiramar.
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