Hasta 500 currículums diarios ha recibido la conservera Albo de aspirantes a ocupar esos 22 nuevos puestos de trabajo que avanzó que crearía en su nueva planta de Salvaterra de Miño-As Neves. Una cifra que asciende a la friolera de 15.000 perfiles laborales que se presentaron para cubrir estas vacantes, desde el pasado febrero y hasta hace un mes que estuvo abierto el proceso de selección.
La histórica conservera, ahora en manos de la firma china Shanghai Kaichuang Marine International, crea empleo en Galicia pese a tratarse de tiempos de pandemia. Como parte de ese proceso de renovación que supone la apertura de una nueva fábrica en el polígono de la Plisan, ampliará su plantilla con entre 22 y 30 nuevos trabajadores, para dar respuesta al aumento de la capacidad productiva previsto.
Hace aproximadamente un mes que se cerró el proceso de recepción de currículums. De hecho, la pasada semana Albo arrancó la formación de una treintena de perfiles que han sido preseleccionados.
Al final de este proceso de preparación se contratará a 22 trabajadores o a todos, según se vea que van funcionando”
La conservera recibió un aluvión de currículums de candidatos como respuesta a las ofertas de trabajo publicadas en sus redes sociales y en los portales de empleo. En un primer momento, Albo no requería ningún tipo de experiencia, pero, ante la abrumadora respuesta, empezaron a demandar un perfil con el título de operario de alimentación y experiencia en el sector.
“Se corrió la voz, empezamos a recibir 500 currículums diarios"
Así que para tratar de gestionar la avalancha de currículums, la empresa se apoyó en el departamento de Orientación Laboral del Concello de Salvaterra de Miño. El pasado enero, el consistorio dio luz a una bolsa de empleo que trató de vehicular la recepción de profesionales para la nueva fábrica. “Se pretendía que fuera una herramienta ágil y eficaz para ayudar a los vecinos en su búsqueda de empleo”, explica la alcaldesa de la localidad pontevedresa, Marta Varcárcel.
El concello, como ha hecho con otras empresas del municipio, efectuó la recepción de currículums y procedió a emparejar los requisitos de la oferta laboral con perfiles de posibles empleados que cumplieran con las necesidades de la conservera. Aunque el proceso de selección, incide Valcárcel, no lo realizó el ayuntamiento sino la empresa de se trabajo temporal, Eurofirms, encargada de realizar la entrevista y las pruebas de habilidad.
Los aspirantes seleccionados encaran ahora un periodo de formación en el que se les prepara para trabajar en todas las áreas de la planta, dicen fuentes cercanas a la empresa. Primero, se les hará un contrato temporal y luego se convertirán en puestos fijos. Los que encajen con el perfil entrarán a trabajar entre uno y dos meses. Al cumplir este plazo, pasarían a formarse durante un mes y accederían a un contrato de seis meses para luego optar a uno de un año.
En una perspectiva histórica, la compañía no ha dejado de engordar progresivamente su masa laboral. El salario de los nuevos empleados se fijará según lo que marque el convenio de cada categoría profesional.
Por su parte, el Concello de Salvaterra lanzó a finales del pasado año un servicio de orientación laboral y una bolsa de empleo en enero. Más allá de Albo, otras empresas han encontrado en esta herramienta una vía para captar personal. “Por ejemplo una empresa solicitó tres conductores de camiones y otra compañía, otros tres albañiles”, explica la edil. “Nos ponemos en contacto con la compañía para decirle que el servicio de orientación de Salvaterra está aquí cuando necesiten algún perfil profesional, que nos solicite información a nosotros”. Una iniciativa que, según avanza Valcárcel, esta dando resultados satisfactorios.
La conservera, que cuenta actualmente con 200 empleados, prevé invertir en su fábrica de Salvaterra 25,5 millones de euros. Estos nuevos empleos pretenden dar respuesta al incremento de producción que la empresa proyecta para esta nueva planta. Hijos de Carlos Albo, propiedad china desde 2016, resultó adjudicataria de tres parcelas en la Plisan con una superficie de casi 63.000 metros cuadrados en subasta pública por el Instituto Galego de Vivenda e Solo. La construcción, a cargo de Dragados, arrancó el pasado enero y el derecho de superficie se le concede por un plazo de 30 años, prorrogable tres veces en períodos de 10 años.
Buena marcha de las obras de Albo
La construcción de la nueva planta de la conservera en el polígono de la Plisan en Salvaterra- As Neves, avanza a buen ritmo._En línea con los pronósticos, que estiman que esté operativa en junio de 2022. La nueva fábrica contará con una inversión de 30,4 millones de euros, de los cuales la conservera desembolsará 25,25 millones. Dragados es la constructora responsable de erigir la infraestructura del nuevo centro de producción de Albo, de 19.300 metros cuadrados, un proyecto que ronda los 15 millones de euros.
