La oposición tumba también el préstamo para cofinanciar la plaza de A Bandeira

PP y BNG alertan sobre el endeudamiento y acusan al gobierno de “maquillar” las cuentas | Pena habla de un “bache” que se arreglará con los ingresos pendientes de Xunta y Estado

Los dos ediles del BNG, sentados al lado de Jesús Taboada, votan a mano alzada.

Los dos ediles del BNG, sentados al lado de Jesús Taboada, votan a mano alzada. / Bernabé/Lucía Abeledo

Xan Salgueiro

Xan Salgueiro

Los votos en contra de PP y BNG volvieron a tumbar el crédito por importe de 239.683 euros que pretendía solicitar el gobierno de Silleda para cofinanciar la obra de la plaza de A Bandeira. De nada le valieron a la alcaldesa, Paula Fernández Pena, las explicaciones de que el Concello sí tiene liquidez, pero no puede utilizarla para esta actuación por no figurar en el presupuesto, ni el compromiso de amortizar la totalidad del préstamo dentro de un año, con los remanentes que, según sus estimaciones, arrojará la liquidación del presente curso.

La situación de las arcas municipales acaparó el debate en un pleno que se prolongó más de tres horas sin que ninguna de las partes se moviese un ápice de sus posicionamientos previos. Las primeras enganchadas llegaron con el reconocimiento extrajudicial de crédito para aprobar facturas por más de 150.000 euros, que salió adelante con la abstención de la oposición. Porque, tal como indicó el portavoz del PP, Ignacio Maril Pardo, “las facturas tienen que ser pagadas”, a pesar de las dudas legales que le suscitaron algunas. PP y BNG relacionaron este procedimiento con un intento de “maquillar artificialmente” la liquidación de 2023. “En la práctica, el remanente positivo de 71.000 euros sería negativo en 81.000”, apuntó el nacionalista Xerardo Díaz Casal.

La votación se repitió en la modificación de crédito para abonar 55.000 euros de intereses bancarios, y la oposición aprovechó para volver a denunciar “el despilfarro” de 2023 con actuaciones electoralistas como la intensificación de los bacheos durante la campaña. “Están haciendo trampas al solitario y esto va a terminar por reventar en algún momento”, advirtió Díaz, que cifró en 1,6 millones de euros los intereses que se acabarán pagando hasta el año 2041 por el crédito de 1,08 millones para la obra del consistorio. “Hacen obras a cuenta de hipotecar a futuras corporaciones”, lamentó.

“Quienes hacen juego político son ustedes –contestó la alcaldesa–, para contarle a la gente que estamos en una situación malísima que nos es cierto. Este Concello tiene músculo financiero”. Pena sitúa el “problema” en la demora de los pagos pendientes de la Xunta y el Estado, que cifra en más de 2 millones de euros. “No hay músculo financiero cuando recurrimos a préstamos”, le replicó Maril, que reiteró que el año pasado “gastaron más de lo que se podía” y le reprochó la falta de presupuestos desde 2022, “otra muestra de su nefasta gestión”. “Si nos ingresan lo que nos deben no tendríamos problema en hacer presupuestos”, contestó Pena.

La regidora se mostró convencida de que el presente ejercicio se saldará con remanentes, una vez que se reciban los fondos pendientes de otras administraciones. Entretanto, afirma que hay dos opciones: pedir un crédito, como proponía, o “subir las tasas, congeladas desde 2014”. Admite que el Concello “necesita una reformulación financiera, pero primero que nos paguen lo que nos deben por competencias impropias”. En este sentido, criticó que la Xunta saque pecho de la gratuidad de las guarderías, cuando a Silleda, por ejemplo, le toca pagar más de 2.000 euros por niño al año.

1,2 millones en bancos

“Si las administraciones superiores nos ahogan acabaremos subiéndoles las tasas a los vecinos, que es lo que usted quiere”, le espetó Pena a Maril. “Tenemos dinero para pagar la obra de A Bandeira, pero no lo tenemos incluído en el presupuesto”, reiteró la regidora, que solicitó insistentemente la aprobación del crédito para no tener que echar mano de otras partidas. El Concello tiene 1,2 millones de euros en cuatro bancos, detalló, “pero no los tenemos en el papel, y la única forma que nos permite la ley es un suplemento de crédito”. Apeló “al consenso, a meditar para salvar este bache de liquidez en el presupuesto, que no de liquidez real”.

“No tengo ningún interés en que se suban las tasas. Si lo hacen, será por sus políticas de gasto desorbitado”, le contestó el edil popular. “Es demagógico decir que se pueden recortar partidas de servicios a los ciudadanos si no aprobamos este crédito”, manifestó la concejala del BNG, Erea Rey Presas. No hubo reconsideraciones por parte de la oposición, que rechazó el “crédito puente”, algo que Pena reprochó especialmente al BNG, que en A Estrada se abstuvo el pasado 26 de diciembre en una operación idéntica de 3 millones de euros. “Nos parece irregular e inmoral”, remachó.

Humanización del área escolar y deportiva

El gobierno sí logró sacar adelante, aunque sin el apoyo de la oposición, que se abstuvo, la aprobación del pliego para la contratación de la mejora de la movilidad peatonal en la avenida Recinto Ferial y la calle Arturo Pérez Lázara, incluído el acceso a la escuela de música. El expediente incorpora dos mejoras que las empresas licitadoras deberán tener en cuenta: la reducción del plazo en un mes para que las obras estén listas para el comienzo del próximo curso y la ejecución del cierre de la piscina para retirar el seto vegetal, que ocupa parte del viario y es un foco de insectos. Contempla penalizaciones de 20.000 euros por incumplimientos, que Maril exigió aplicar, llegado el caso, “no como en la Progreso”. Este proyecto de humanización del área escolar y deportiva está presupuestado en 893.000 euros, financiados a través del programa provincial PON2030, que exige una aportación municipal ya retenida, según Pena. La corporación acordó por unanimidad adherirse a la Central de contratación de la Federación Española de Municipios y Provincias. También se aprobó, sin apoyo del PP, la descatalogación de la nueva casa consistorial como bien protegido.

Defensa del Ulla y rechazo al cultivo intensivo de viña

La sesión había arrancado con la aprobación de una declaración institucional a favor del reconocimiento de los derechos del río Ulla, promovida por Ecoloxistas en Acción, Amigas da Terra y Greenpeace ante la amenaza de instalación de industrias contaminantes. El último punto del orden del día también tenía relación con la protección del ecosistema de la ribera del Ulla: la moción del BNG en contra de las plantaciones intensivas de viñedo para producción de albariño salió adelante por unanimidad.

Aplauso unánime a Jesús Taboada en su adiós

El pleno de ayer fue el último para Jesús Taboada Lázara, “gran amigo y grandísima persona”, en palabras de la alcaldesa. El concejal socialista de Laro recibió el cariño de todos los componentes de la corporación y de dos que ya no forman parte de la misma, el exalcalde, Manuel Cuiña, y el exedil Klaus Brey, que le arroparon con su presencia. “Fue un placer que tu familia se cruzara en mi vida”, le dijo Pena, que le deseó la recuperación de su esposa para disfrutar juntos de “una merecida jubilación”. Maril agradeció “el tiempo compartido” con un “compañero amable y cordial, gente buena que da gusto encontrar”. Rey también le reconoció el trato educado y el trabajo desempeñado. Taboada, a quien relevará otra ganadera, Asun García Hernández, de Escuadro, levantó la sesión y recibió el aplauso en pie de toda la corporación.