Un Pontevedra insulso cede el liderato

El Pontevedra no pasó del empate ante un Langreo muy ordenado y cede el liderato al Ourense que sí hizo los deberes y ganó a la Arandina 2-0. Los de Yago Iglesias no tuvieron la clarividencia en ataque de otros partidos por lo que a Rufo apenas les llegaron balones en condiciones. Aunque el conjunto granate tuvo más dominio y posesión, el empate se antoja justo porque los locales también tuvieron sus ocasiones, sobre todo en la primera parte.

Un Langreo muy motivado de inicio tuvo la primera llegada peligrosa a los diez minutos, Nané cedió a Iago Novo pero finalmente la zaga pontevedresa desbarató la acción. No estaban cómodos los pupilos de Yago Iglesias en el césped del Nuevo Ganzábal. Estaban muy imprecisos en el pase y cedían a la fuerte presión del rival que al cuarto de hora tuvo otra gran ocasión para adelantarse en el marcador, Edu Sousa repelió un disparo de Carlos Cid y el rechace la cayó a Luis Sánchez que estrelló el balón en el larguero.

“No hemos estado acertados y eso es lo que marca la diferencia”

Con el paso de los minutos, el Pontevedra se fue sacudiendo el dominio de su rival y fue equilibrando el choque a partir de tener más la posesión. Combinar en el centro del campo era la mejor fórmula de reducir el ímpetu de su rival que se cansaba persiguiendo el balón. La mejora tampoco evitó que se llevaran algún susto, como el que se llevaron pasada la media hora cuando Iago Novo se plantó ante Edu Sousa pero disparó alto.

Otra vez peligro para los granates, que habían equilibrado el juego en el centro del campo y en la posesión pero que tenía que dar una paso más, crear peligro sobre la portería rival para que el Langreo también reculara y cediera en su empuje al sentirse amenazado por el rival. Y se puso a la obra un Pontevedra que mejoraba claramente con el paso de los minutos.

Fruto de esta mejora llegó la primera gran ocasión de los de Iglesias. A punto de llegar el minuto 40, Adrián Torre evitó por dos veces el gol del Pontevedra. Primero, sacó un buen remate de Yelko Pino y aún tuvo tiempo para reaccionar al rechace y repeler un segundo remate de Dálisson.

En los últimos minutos del primer tiempo ya era el Pontevedra dominador de la situación pero no hubo tiempo para más y los dos equipos se fueron a vestuarios sin que se moviera el marcador. El Langreo perdonó en la primera hora y el Pontevedra, en los últimos 15 minutos. Todo estaba por decidir en la segunda parte y a los lerezanos les tocaba ser más ambiciosos.

Tras el paso por vestuarios, los de Yago Iglesias mostraron una vocación más ofensiva que en la primera mitad. El conjunto granate, ahora sí, asumió el control del juego y como consecuencia de ello tuvo llegadas peligrosas: primero Dálisson disparó alto y poco después Gonzalo desbarató una acción en la que Rufo se podría haber quedado franco para marcar.

Al cuarto de hora, Mazo Maruri anuló un gol a Dálisson por un fuera de juego que discutieron bastante los gallegos. Tras este arreón, el Pontevedra siguió amasando el balón pero el Langreo se enchufó en defensa y no permitió que se acumularan las ocasiones de gol, aunque volvió a tener una buena llegada el Pontevedra en el minuto 78 con un centro muy peligroso de un activo Dálisson que despejó Adrián Torre.

Con el paso de los minutos, al Pontevedra se le fueron agotando las ideas en ataque, quizás por el cansancio acumulado, mientras que el Langreo impuso su oficio defensivo.

El Pontevedra acabó el partido jugando en campo contrario pero el Langreo exhibió un gran nivel defensivo y se cobró su particular venganza, empatando para dejar a los de Yago Iglesias sin liderato.

Aunque el Pontevedra tuvo el mando del partido se mostró con pocas ideas en ataque y menos capacidad de desborde lo que hizo que apenas le llegaran balones a Rufo.

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