Automovilismo

Pulso por la Fórmula 1

El GP de Madrid 2026 hace peligrar el de Barcelona

Carlos Sainz y Fernando Alonso, en Montmeló. |  // EFE

Carlos Sainz y Fernando Alonso, en Montmeló. | // EFE / Miguel Martínez

Miguel Martínez

El proyecto, ideado por Pablo de Villlota, sobrino y primo de Emilio y María de Villota, dormitaba en un cajón. Las mayorías absolutas del PP en el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid han reactivado la idea de celebrar un gran premio de Formula 1 en Madrid. El PP se ha empeñado en arrancar la F-1 de Barcelona. Cuenta con los parabienes de los dueños del negocio, la FOM y Liberty Media.

El proyecto de trazado utiliza las instalaciones de IFEMA y pasa por terrenos de Florentino Pérez en el área de Valdebebas. Los cimientos del proyecto son tan sólidos que pocos dudan de que en 2026 Madrid celebrará su gran premio y pondrá en riesgo la continuidad de cuatro décadas de F-1 en Montmeló. La FOM no es partidaria de dos grandes premios en un país, aunque no sería la primera vez.

Realmente, los únicos obstáculos del Gran Premio en Madrid obedecen la lucha de egos entre Isabel Pérez Ayuso, presidenta de la Comunidad, y el alcalde, José Luis Martínez Almeida por arrogarse la titularidad del proyecto.

La pujanza social y económica ha sido la llave para determinar los enclaves de la F-1. Pedralbes fue el primer escenario en España en los años 50, mientras que el trazado semiurbano de Montjuic y el permanente del Jarama se alternaron entre 1968 y 1975. La F-1 eligió después circuitos permanentes como el propio Jarama (1976-1982), Jerez (1986-1990 y 1997 como GP de Europa) y Montmeló (1991-2026) para recuperar la idea de Montjuic: un circuito semiurbano, en la ciudad, pero que no colapse el centro, y a la que los seguidores puedan acudir en transporte público, un modelo que nunca cuajó en el experimento de Valencia marcado por el desmesurado gasto público y la corrupción (GP de Europa 2008-2012).

Mónaco, Singapur, Abu Dhabi, Baku, Yeddah, Las Vegas, Miami… Esa es la tendencia. Han sido muchas les reuniones entre los promotores del Gran Premio en Madrid y los responsables de la F-1, que deslizaron la idea de que algunos de los antiguos gestores del Circuit de Catalunya formaran parte del proyecto de Madrid, como así ha ocurrido.

En el trazado de Madrid aparece un curvón peraltado, al estilo Indianápolis, que pasará cerca de la Ciudad Deportiva del Real Madrid. El trazado seguirá en dirección a IFEMA a través del túnel ya construido por debajo la M-11 y con un tiro de cámara ya previsto sobre el skyline de las cinco torres levantadas sobre la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid.

Dicen los promotores que no quieren repetir el experimento de Valencia y aseguran que el grueso del gasto/inversión, unos 200 millones por edición (la huella económica está calculada en unos 500 millones), tendrá su origen en el capital privado. El GP de Miami recaudó en entradas y paddock unos 200 millones y ahora mismo es el espejo en el que se mira Madrid y otros que asoman en el horizonte como Colombia o Sudáfrica. Stephen Ross, el empresario que ha respaldado Miami, es uno de los nombres que suena como inversor, junto al multimillonario mexicano Carlos Slim. Ahora mismo, esa financiación se mueve en ese triángulo, Pérez-Slim-Ross, a los que se podría unir Miguel Ángel Gil Marín. Todos ellos se reunieron en Miami.

Casi todas la piezas del puzle parecen encajadas para que Madrid sea a partir de 2026 la nueva sede del Gran Premio de España, con al menos un año de convivencia con Montmeló –el Circuit tiene firmado hasta 2026–. En Italia conviven dos, en EEUU, tres, y en España ya sucedió con Montmeló, Jerez y Valencia, cuando estos últimos se denominaban GP de Europa. A la FOM no le gusta la idea, pero depende de muchos factores, como la entrada o no de otras sedes nuevas.