Redondela recupera su monolito

El monolito de piedra que marca el inicio del Camiño de A Franqueira en el acceso a Redondela desde Porriño, en plena ruta jacobea, ya vuelve a presidir la Praza de Ponteareas.

El monumento fue colocado en 2005 en una de las isletas de la entrada a la localidad, en el inicio de la calle José Rogojo, un lugar estratégico a la vista de todo el que accedía al casco urbano. Sin embargo, el pasado año, con motivo de las obras de reforma integral de esta zona del barrio de Vilavella, el cilindro de piedra fue retirado y nada más se supo de él.

¿Y el monolito de Redondela?

La plaza presenta una nueva imagen humanizada, con un aspecto moderno en el que prevalecen los espacios destinados a los peatones frente a los vehículos y dotado de amplias zonas verdes. Pero en todo el espacio faltaba el monolito del Camiño de A Franqueira. Hasta que el mes pasado la asociación cultural Alén Nós reclamó públicamente la reposición de este elemento como una pieza importante del patrimonio redondelano.

Promover el peregrinaje

El enorme hito fue una iniciativa promovida por el exalcalde socialista Xaime Rei, cuando hace 18 años impulsó la creación de una asociación intermunicipal con el objetivo de potenciar el peregrinaje hasta el santuario de A Franqueira (A Cañiza) mediante la puesta en valor del camino y su patrimonio cultural y medioambiental.

El miliario redondelano marcaba el punto de partida de la revitalización de esta tradicional ruta de 42 kilómetros, cuya antigüedad se remonta a finales del siglo XI. La colocación de los miliarios en las localidades por las que pasaba el camino fue la primera de una serie de actuaciones que acometieron la Xunta y la Diputación en esta vía de peregrinación, que fue dotada de elementos singulares, áreas recreativas, además de actuarse en la recuperación del patrimonio etnográfico en los distintos municipios.

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