Aspas se rebela contra el edadismo

El moañés es el sexto jugador del Celta con más minutos disputados este curso y Benítez parece haber aparcado su plan de dosificar los esfuerzos del veterano capitán de 36 años

Iago Aspas, tras marcarel gol en San Mamés. // E.P.

Iago Aspas, tras marcarel gol en San Mamés. // E.P. / J. conde

Rafa Benítez lo intentó, pero Iago Aspas se niega a que le dosifiquen los esfuerzos. El moañés es ahora mismo el sexto jugador de la plantilla del Celta que más ha jugado en LaLiga, superando la barrera de los mil minutos. Con 36 años, el ídolo del celtismo se rebela contra el edadismo, contra quienes pretenden jubilarlo para el fútbol. Le faltaba el gol para reivindicarse. Se estrenó como goleador el viernes pasado en San Mamés, donde disputó el partido completo después de marcar, dar una asistencia y fallar un penalti. El mago de Moaña está de vuelta. Como ha ocurrido en otras muchas ocasiones, Aspas se muestra dispuesto a dar lo mejor de sí para sacar a su equipo del atolladero en el que se ha metido después de sumar 7 de los 39 puntos disputados en lo que va de campeonato.

Benítez llegó a Vigo el verano pasado con un contrato como entrenador del Celta para las tres próximas temporadas bajo el brazo y con la intención de construir un equipo más solvente que el que durante las últimas temporadas había coqueteó peligrosa y reiteradamente con el descenso. Es más, de la mano del veterano y laureado técnico cobraba fuerza la idea de alcanzar el anhelado título para una entidad que estaba a punto de cumplir cien años.

En su primera entrevista como jefe de Afouteza, Benítez desveló a DAZN su intención de dosificar a Aspas, para que el moañés ofreciese esta temporada “más calidad que cantidad”. El técnico recordaba con frecuencia la edad del moañés y hacía referencia al ciclo biológico de la vida de un deportista de élite. Con 36 años, era necesario cuidar y proteger a un jugador que podía ser importante en los momentos decisivos del campeonato. Para ello, había que evitarle esfuerzos y apariciones innecesarias en escenarios en los que el Celta contase con pocas opciones de triunfo.

La idea planteada por el nuevo entrenador del Celta se fue confirmando desde el primer partido de Liga: en la visita de Osasuna a Balaídos, Aspas se fue al banquillo en el minuto 82. En la octava fue suplente en Las Palmas y solo disputó los últimos 21 minutos. Al alcanzarse la décima jornada, el moañés explotó cuando Benítez lo retiró del campo en el minuto 61. Era su quinta sustitución, además de la suplencia en Canarias. Había sido relevado en más ocasiones en este inicio de curso que durante toda la temporada anterior. Al finalizar su participación contra los rojiblancos, Aspas se marchó muy malhumorado hacia el banquillo, donde lanzó dos patadas antes de sentarse en la segunda fila. Hasta allí acudió raudo Rafa Benítez para intentar tranquilizar al capitán céltico. El técnico era consciente de la delicada situación del equipo por sus malos resultados y no parecía conveniente abrir un frente de fricción con el capitán e ídolo de la afición. En el siguiente compromiso, en Girona, Aspas disputó los 90 minutos. Es verdad que el entrenador del Celta sólo realizó dos cambios en aquella ocasión en Montilivi. En la jornada siguiente, el moañés tampoco concluyó el partido ante el Sevilla. Se fue en el minuto 69, con el marcador a favor de los célticos y con los sevillistas apretando en busca del empate. El partido, entonces, requería piezas de refresco en el Celta y Aspas no tuvo inconveniente en dejar sitio a Dotor para reforzar el centro del campo. En San Mamés, Aspas recuperó la frescura física que le había llevado al estrellato y Benítez lo mantuvo sobre el césped hasta el final del choque.

Concluida la decimotercera jornada de LaLiga, Aspas figura como el sexto céltico con más minutos jugados. Este ránking lo encabeza Unai Núñez, con 1.169 minutos. El zaguero vasco no ha podido completar todo el tiempo de juego porque fue sustituido en una ocasión en el descuento. Jonathan Bamba aparece en la segunda posición, con 1.111 minutos. Muy cerca se sitúan Óscar Mingueza y Carl Starfelt, con 1.095 y 1.080 minutos, respectivamente. Strand Larsen ocupa la quinta posición, con 1.013, diez minutos más que Aspas (1.003).

Estos datos de participación confirman que el plan diseñado por Benítez para Aspas se ha visto modificado y el delantero continúa siendo la máxima referencia del Celta en el juego de ataque. Es verdad que la producción goleadora del capitán céltico se encuentra en mínimos (1 gol después de 23 jornadas de sequía), pero su influencia en el juego continúa siendo vital para el conjunto vigués. La estrella de Moaña ha dado 4 asistencias de gol. La última fue en un ejercicio de maestría para que Larsen marcase en San Mamés. Era la primera vez que el gallego y el noruego tenía una conexión tan directa en un gol y que marcaban en el mismo partido.

La de asistente, precisamente, es una de las facetas de Aspas que Benítez quiso destacar cuando el técnico planteaba la necesidad de dosificar en determinados partidos al veterano capitán del Celta. “Nos tiene que dar calidad, y nos la está dando; y mientras Larsen y Douvikas sigan marcando goles, él puede seguir dando asistencias. Pero yo quiero ver a Aspas meter goles porque sé que estaría mucho más feliz. Es un jugador distinto, diferente, hay que mimarlo, cuidarlo y tiene que ser una referencia para los chavales que llegan, para que vean lo que es sentir los colores”.

Como apunta Benítez, Aspas continúa siendo una referencia en el Celta, que necesita del talento y la calidad técnica del moañés para superar una grave crisis de resultados que le mantienen desde hace muchas jornadas en puestos de descenso. Aspas se ha estrenado como goleador. Se rebela contra quienes le consideran mayor para el fútbol. Es un buen síntoma para un equipo que mantiene la costumbre de sufrir más de lo que espera su afición para sumar puntos.

El sábado 16, a las 14 horas, Celta-Granada

El Celta ya conoce los horarios de los seis partidos que le restan para concluir 2023, el año de su centenario. LaLiga hizo públicas ayer las fechas de las jornadas decimoséptima y decimoctava. En la primera, el Granada visitará Balaídos el sábado 16 de diciembre a las 14 horas. En la siguiente jornada, los célticos visitarán al Villarreal el miércoles 20 de diciembre a las 21:30 horas. A partir de ahí, LaLiga no se reanudará hasta principios de enero.Antes, el Celta jugará en Valencia (sábado 25 de noviembre), recibirá al Cádiz (lunes 4 de diciembre), después jugará la Copa el jueves 7 en Sestao y el lunes 11 acudirá a Vallecas.

Suscríbete para seguir leyendo