El Celta lleva tiempo trabajando en un mecanismo que permita a sus abonados ceder los abonos a terceras personas cuando no puedan asistir a los partidos. El club está desarrollando un programa para que la cesión de estos carnés pueda realizarse de un modo cómodo y con garantías de seguridad y espera presentarlo en un plazo más o menos breve de tiempo.

La cesión de los carnés ha sido demandada por un sector importante de la afición para intentar solventar el problema de los asientos vacíos de los aficionados que no asisten a los encuentros. La medida había sido planteada al responsable del Área Social del Celta, Raúl Rivas, encargado de diseñar la última campaña de abonados.

Existen algunas complicaciones técnicas que están pendientes de solucionar, pero que el club confía en tener listas una vez se termine de desarrollar el programa. El Celta quiere dejar todo bien atado, sin lagunas legales, para evitar que la experiencia pudiese acabar en el juzgado, como recientemente le ha ocurrido al Barcelona o al Real Madrid por el reparto de beneficios de esa cesión. Otros clubes, como el Athletic de Bilbao, ya tienen habilitado un mecanismo online que permite a sus socios ceder sus carnés.

Campaña de abonados

El presidente del Celta, Carlos Mouriño, realiza por otra parte una “valoración muy positiva” de la última campaña de abonados. La campaña ha recuperado a muchos de los socios fugados en los últimos dos años y ha incrementado la masa social de la entidad hasta los 16.000 abonados. La falta de espacio debido a las obras del estadio ha obligado al club a suspender las altas de abonos debido a que LaLiga exige reservar un porcentaje de entradas para su venta el público. El Celta espera abrir un nuevo plazo de altas una vez esté concluida la reforma de Marcador, pero no tiene certeza de cuándo va a estar rematada la obra. El Concello ha señalado que estará terminada a comienzos del próximo año, pero Mouriño se muestra escéptico y recuerda que el consistorio ha incumplido sistemáticamente los plazos de una reforma, la de todo el campo, que tendría que haberse concluido en 2017.

Al Celta le preocupa también cuándo va a comenzar la reforma de Gol, que por ahora ni siquiera está licitada. Tampoco entiende cómo espera ampliar el Concello el estadio hasta los 40.000 espectadores para que la instalación pueda optar a ser sede del Mundial en 2030. Los expertos del club consideran imposible incrementar en 15.000 personas el aforo. “Creemos que es una vez más una patada hacia delante, un quedar bien, sin ninguna posibilidad de éxito”, indica Mouriño sobre Abel Caballero. “Hoy técnicamente hacen maravillas. A lo mejor lo hacen. No sé cuánto costaría. Pero sobre un supuesto, se deberían modificar las gradas que hay; no con gradas supletorias. Que me expliquen cómo”.

El dirigente valora, por otra parte, el alto índice de asistencia al estadio de Balaídos en los tres compromisos ligueros que se llevan disputados en el coliseo celeste. En Príncipe creen que las buenas entradas registradas en estos primeros compromisos ligueros son un síntoma de que “se ha despertado ilusión por ver al Celta”.