El Celta tendría que haber disputado ayer el partido de la vigésimo octava jornada de LaLiga contra el Villarreal, pero la pandemia de Covid-19 ha obligado a aplazarlo todo y confinarse en casa para evitar una mayor propagación del coronavirus. Y a ese encierro se han sumado los célticos, atendiendo así a las recomendaciones de los responsables sanitarios y de gobierno. Futbolistas como Iago Aspas han aprovechado esta inactividad obligada para sumarse a la campaña en redes sociales que apuesta por el aislamiento domiciliario. Otro astro gallego, el veterano Luis Suárez, continúa sin poder pisar las calles de Milán, donde reside desde hace tiempo, ante el elevado riesgo de contagio en Italia. Suspendidos los entrenamientos en A Madroa, futbolistas como Hugo Mallo y Fran Beltrán aparecían ayer ejercitándose en un gimnasio.

"Seamos responsables y quedémonos en casa", proclamaba Denis Suárez en la tarde de ayer junto a un vídeo en el que se ve al céltico en su casa, peloteando con sus mascotas". El salcedense podrá aprovechar este paréntesis en la competición -la federación tomará nuevas decisiones el 25 de marzo sobre las competiciones- para dejar atrás los problemas en su tobillo derecho que arrastra desde hace meses y que le impidieron disputar varios partidos y acabaron afectando a su rendimiento.

A quien puede perjudicar esta inactividad competitiva es a Iago Aspas, que en esta primera jornada sin Liga tenía previsto regresar al equipo tras perderse la cita de Getafe por sanción. El moañés, sin embargo, quiere aprovechar este paréntesis para recargar energías junto a la familia. En las últimas horas, Aspas colgó un vídeo en su cuenta de Instragram jugando a la pelota con su hijo Thiago en el jardín de su casa y a ritmo de 'A Rianxeira', uno de los himnos oficiosos del Celta. "Yo me quedo en casa", incluyó como mensaje el astro morracense en apoyo a las recomendaciones oficiales para luchar contra el Covid-19.

Su excompañero Claudio Beauvue, ahora en el Deportivo, se mostraba indignado ayer con la gente que disfrutaba de la playa del Orzán. "A mí también me gustaría pasear con mi familia, correr sobre la playa... Pero, ¿somos conscientes de verdad? ¿A qué esperáis para quedaros en casa? ¿Tendrá que pasar una desgracia mayor para que todos hagamos caso?", escribía el delantero antillano.

Los hermanos García Junyent, a través del canal que utilizan para su fundación, apelan a la responsabilidad ciudadana para salvar esta crisis sanitaria: "Cuidar los unos de los otros, hagamos caso a los consejos de las autoridades y... ¡Seguro que nos vemos más pronto que tarde!", apuntaban en las últimas horas los técnicos del Celta, que no tiene fecha de regreso a la actividad y que tampoco podrá viajar el sábado que viene a Valladolid, el otro partido suspendido hasta el momento.

Mientras tanto, Mallo, Beltrán y Pape Cheikh muestran imágenes trabajando en el gimnasio. Jeison Murillo, por su parte, comparte juegos con su hija Celeste. Los célticos no bajan la guardia.