Los vecinos de San José piden una respuesta a Ravella a sus quejas por el estado de la plaza

La comunidad vecinal del barrio vilagarciano de San José se encuentra actualmente en un estado de descontento con el Concello de Vilagarcía debido al resultado de las obras de remodelación llevadas a cabo en la plaza.

En un gesto de protesta, alrededor de una decena de vecinos colocaron ayer una pancarta que expresa claramente su frustración: “Se consumó el acto 20/12/23. Toma zahorra. ¿Esto quedará así?”. Esta acción simboliza el rechazo generalizado hacia unas obras que han generado numerosos inconvenientes para los residentes del barrio.

Las obras de remodelación comenzaron en octubre pasado, pero fue en diciembre cuando se instaló un solado de zahorra y hormigón que no ha sido del agrado de los vecinos. Además de expresar su disgusto por el aspecto estético, los residentes también están preocupados por los problemas prácticos que ha generado la nueva superficie. En este sentido, ya se han quejado al ayuntamiento de la pérdida de arena debido al viento y la formación de charcos como resultado del desnivel de la superficie.

Además, el proyecto original incluía la instalación de árboles y bancos, sin embargo, estos elementos aún no han sido colocados. Una vecina comentó que “solo tenemos unos contenedores que han trasladado desde Rosalía de Castro para la plazoleta”. A pesar de haber expresado sus quejas ante las autoridades municipales, los residentes sienten que no se les está dando la debida atención. La situación se agrava con la falta de drenaje en las alcantarillas, lo que ha llevado a “la formación de charcos peligrosos tanto para conductores como para peatones” destacan los vecinos.

La plaza de San José ha sido renombrada por los propios vecinos como “Praza da Desilusión” debido a su decepción con el resultado de las obras. Incluso decidieron instalar un cartón con ese nombre en un escaparate. Esta protesta representa el descontento de una comunidad de aproximadamente 200 vecinos. Es importante destacar que estas obras formaban parte de un acuerdo entre el Ayuntamiento de Vilagarcía y los promotores de la urbanización Villa Güimil para mejorar el entorno de la capilla de San José, sin uso desde hace cuatro años, en beneficio de los residentes locales y tras unas negociaciones intensas con el Arzobispado que era el propietario de los terrenos. Todo ello para hacer bueno el convenio alcanzado entre Concello y promotora hace más de una década.

Los residentes mantienen la esperanza de que el solado sea completamente hormigonado o, en su defecto, que la zahorra sea compactada adecuadamente para evitar su dispersión y lograr una superficie completamente nivelada. Una vecina comentó: “Nos dijeron que iba a ser una superficie impermeabilizada y de eso no hay nada”.

En resumen, la comunidad de San José en Vilagarcía continúa expresando su descontento por el estado actual de la plaza, instando a las autoridades municipales a tomar medidas para abordar los problemas surgidos tras las obras de remodelación. A este respecto, añaden los vecinos que se debería actuar a la mayor brevedad para evitar que el deterioro de los trabajos realizados siga perturbando el día a día del barrio.

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