Un finde de callos y cocido
Meaño festejó el San Amaro
San Vicente recaudó fondos para Cáritas Parroquial
Los arousanos disfrutaron de otro fin de semana caracterizado por la celebración de diferentes citas gastronómicas.
Entre ellas, pueden citarse la degustación de callos ofrecida en el Concello de Meaño, con motivo de la fiesta de San Amaro, y un multitudinario cocido ofrecido ayer en Sanxenxo, a instancias de Cáritas Parroquial de San Vicente de O Grove.
Juan Ventura Martínes Reboreiras
Empezando por esto último, decir que entre los organizadores de esta nueva cita solidaria con la que ayudar a los más necesitados se encontraba el cura párroco de San Vicente y de Santa María de Simes (Meaño), Juan Ventura Martínez Reboeiras.
Fue él, precisamente, uno de los artífices tanto de este cocido solidario, con el que recaudar fondos para Cáritas de San Vicente, como del homenaje sorpresa que se realizó en el transcurso del almuerzo a la directora de esa organización.
No es otra que Carmen Pérez Álvarez, más conocida como Carmen de García y una mujer que durante casi toda su vida ejerció como catequista, y que a los 70 años, cuando Juan Ventura se hizo cargo de la parroquia, participó con el propio sacerdote en la fundación de Cáritas Parroquial.
Solidaria
“Desde aquel momento no ha dejado de entregarse a la parroquia y a los demás, como ya había hecho siempre, de ahí este merecido homenaje”, explicaba ayer el sacerdote vilanovés asentado en O Grove.
En cuanto a la fiesta gastronómica y solidaria propiamente dicha, decir que en el almuerzo desplegado en el restaurante Casa Encarna participaron 176 comensales que dieron cuenta de sopa, cocido y postres tan típicos de esta épica y el carnaval que se avecina como las filloas y las orejas.
San Amaro
En cuanto a los callos del San Amaro meañés, decir que se ofrecieron durante la verbena desarrollada el sábado a los pies de la ermita, con actuación del trío Azabache desde las ocho de la tarde.
Fue a eso de las 22.00 horas cuando llegaron al recinto dos grandes ollas repletas de callos bien calientes, cocinados para la ocasión en el restaurante Casa Rodiño.
Con el párroco ataviado para la ocasión, como es tradición, los callos empezaron a dispensarse desde la barra en grandes cantidades.
Se hicieron acompañar de tinto Barrantes, refrescos y pan de bollo servido de forma gratuita.
Al filo de las 23.00 horas llegaba el recinto el postre, en una olla con 30 litros de chocolate caliente suministrado desde el restaurante Quinta de San Amaro, acompañado de doce kilos de un jugoso roscón que hizo las delicias del público.
Acto seguido se preparó un buen pote de queimada, que ayudó a los más osados a prolongar la celebración hasta el filo de la una de la madrugada.
En el ambiente, ese poso de fiesta “enxebre” de aldea que caracteriza al San Amaro de Meaño y que cada año cita a los lugareños más fieles, convirtiéndose en una entrañable jornada de convivencia para los parroquianos.
Suscríbete para seguir leyendo
- Mata presuntamente a su cuñado con un arma blanca en plena calle tras una discusión en Vilagarcía
- El vecino de A Illa detenido por apuñalar a su cuñado comentó a sus conocidos que tenía intención de matarlo
- En libertad dos de los tres detenidos tras el crimen de Vilaxoán
- “Ofrecemos un festival asequible para todos; la entrada más cara será de 30 euros”
- Fallece Manuel Otero, uno de los padres de la DO Rías Baixas
- La policía registra el narcopiso en el que se fraguó el crimen de Vilaxoán
- La ley “de segunda oportunidad” evita a un arousano pagar una deuda de 5 millones
- Crimen de Vilaxoán: un cóctel de viejas rencillas, violencia y drogas