El alcalde de O Grove, el socialista José Antonio Cacabelos Rico, confirma que las gestiones realizadas han dado sus frutos y que el Concello está en condiciones de escolarizar a la veintena de niños que han quedado sin plaza en la guardería de Rons.
Será así porque, “después de múltiples gestiones y reuniones, la Xunta nos ha autorizado a disponer de un Punto de Atención Infantil (PAI), que es una figura contemplada para dar servicio a zonas donde no hay guardería, especialmente en municipios de menos de 5.000 habitantes”.
Esgrime el regidor que “en este caso se hará una excepción para que también en O Grove podamos disponer de PAI, de ahí que estemos en condiciones de cumplir el compromiso adquirido con los padres de los niños”.
Sabedor de la importancia de esta medida, ya que los progenitores incluso se movilizaron hace unos meses para mostrar su preocupación y reclamar la consecución de más plazas, el alcalde resalta que “eso es lo que se va a hacer ahora, para dar servicio a la veintena de niños que quedan fuera de la guardería de Rons”.
Con la esperanza de que se agilice el procedimiento al máximo, para que todo esté a punto el mes que viene, Cacabelos esgrime que conseguir este PAI “nos costará unos 38.000 euros”, que es la cantidad necesaria “para adaptar las instalaciones” del “colegio de las monjas” y habilitar las aulas necesarias de acuerdo con los requisitos que establece el Consorcio Galego de Servicios de Igualdade e Benestar.
Parece que sus técnicos ya visitaron la villa meca y “estuvieron hablando con Ángeles Domínguez, Pilar Galiñanes y otros compañeros del gobierno para ver cómo sacar esto adelante”, apunta.
El primer paso será contratar las obras, “quizás esta misma semana”, para que estén “ejecutadas a la mayor brevedad”.
Y al mismo tiempo, la concejala de Educación, Pilar Galiñanes, “ya está contactando con diferentes empresas para conseguir los monitores necesarios para la prestación del servicio de guardería, teniendo en cuenta que como en O Grove no disponemos de una municipal, tampoco tenemos los trabajadores especializados que se necesitan para el PAI”.
El máximo mandatario meco termina diciendo que en breve se abrirá el plazo de matriculación “para dar entrada a todos los niños que quedaron fuera de la guardería de Rons”.
Fue en mayo cuando José Antonio Cacabelos Rico se reunió con los representantes de los padres afectados por la carencias de plazas suficientes para menores de tres años en la escuela infantil del barrio de Rons.
Lo hizo para dejarles claro que el Concello no tiene responsabilidad alguna, ya que no se trata de una instalación municipal, y advertirles de que la solución a este “grave problema” está en manos de la Xunta, y pasa, necesariamente, por ampliar el edificio y dotarlo de más aulas y personal.
En cualquier caso, y dado que eso ya no será posible el curso que viene, el regidor ofreció como alternativa y salida provisional, la ocupación del conocido como “colegio de las monjas”, que el Concello se disponía a comprar aquel mismo mes.
“Después de enormes dificultades administrativas, que por fin hemos solucionado –esgrimía el primer edil–, en próximos días podremos formalizar la compra” del edificio en el que se situaba desde hace décadas el colegio de Nuestra Señora.
La idea era que una vez formalizada la adquisición pudiera ser adaptado para destinarlo a usos sociales, para personas de avanzada edad, y, temporalmente, acondicionado como centro educativo en el que matricular a esos niños de menos de tres años que van a quedarse sin plaza en Rons el curso que viene.
“Entiendo que todo pasa por utilizar temporalmente las aulas del colegio de las monjas”, recalcó Cacabelos hace tres meses, tratando de apaciguar los ánimos de unos progenitores que días antes se manifestaban para mostrar su enfado y arremeter contra la Xunta y el propio Concello”.
“Entre los padres y el Concello tenemos que estudiar el modo de escolarizar a esos niños, aunque sea temporalmente y pensando en el curso que viene, a la espera de que la Xunta asuma de una vez por todas su responsabilidad en todo esto”, insistía una y otra vez el alcalde, para dejar claro que usar el “colegio de las monjas” será algo provisional, “a la espera de que el Consorcio amplíe Rons y oferte más plazas, tanto en O Grove como en toda Galicia”.