La aprobación del PXOM abre una nueva era del urbanismo

El pleno del Concello olívico valida el documento, en exposición pública hasta el próximo 18 de enero, que recoge actuaciones por más de 876 millones de euros

Vigo fortaleció su músculo urbanístico con la consecución de la tan ansiada aprobación inicial del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) en un pleno celebrado a finales del mes de agosto. El documento subió un peldaño más –tras lograr el visto bueno de la Xerencia Municipal de Urbanismo y de la Junta de Gobierno Local– en su camino hacia la validación definitiva, que se espera en el año 2023. Superó este trámite con los votos a favor del grupo socialista. Marea de Vigo y BNG se decantaron por la abstención en una sesión en la que la oposición afeó al gobierno local la falta de participación en el proceso de confección del escrito. Desde el 13 de octubre, está en exposición pública, periodo que se prolongará hasta el próximo 18 de enero.

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La nueva hoja de ruta del urbanismo olívico contempla inversiones públicas y privadas en urbanización e infraestructuras que ascienden a más de 876 millones de euros, dinero que se asigna a los bolsillos de los promotores privados –más de un 34% del total–, del Concello –casi un 34%–, de la Xunta de Galicia –cerca del 20%–, del Gobierno de España –un 9,7%– y de la Diputación de Pontevedra –un 3,1%–.

Entre las actuaciones previstas más sustanciales, sobresalen la edificación de más de 50.000 viviendas –14.500, con algún tipo de protección–, la cobertura parcial de la AP-9, la construcción de una glorieta a la altura de la avenida de Buenos Aires para favorecer la conexión entre el barrio de Teis y su industria con el centro de la urbe, el tramo en Vigo de la futura autovía A-59 a Pontevedra, una carretera para unir el Seminario con el Hospital Álvaro Cunqueiro, la Universidad de Vigo y los polígonos de Balaídos y el PTL, la humanización de la avenida de Madrid, la construcción de ocho nuevos grandes parques –en Sárdoma, Teis, Matamá o la avenida de Europa–, la ampliación del polígono de Balaídos y del Parque Tecnológico y Logístico (PTL) de Valladares, la reordenación del enlace de Arquitecto Palacios con la avenida de Madrid, Martínez Garrido y Gregorio Espino, 20 nuevos colectores de pluviales y cinco tanques de tormenta, nuevas zonas deportivas –en A Balsa, Oia o Tomada– o la recuperación de instalaciones industriales históricas para darles una segunda vida con usos residenciales y públicos –como Bernardo Alfageme, La Artística o GEA–.

La aprobación inicial del nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal fue aplaudida por el colectivo de empresarios, constructores y promotores, que destacan la necesidad de su entrada en vigor cuanto antes para generar un escenario con seguridad jurídico-urbanística capaz de transferir confianza a los profesionales que se encargarán de dar forma al Vigo del mañana.

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El proyecto, impulsado por el fondo Autonomy Global Opportunities y promovido y comercializado por Gestilar, prevé la construcción de más de 260 viviendas, una plaza de unos 5.000 metros cuadrados (m2) volcada al mar –se duplica la longitud del mirador del Paseo de Alfonso–, una zona comercial de 14.000 metros cuadrados con 300 plazas de garaje vinculadas –a las que se sumarán otras 300 de un parking público para residentes del Casco Vello–, zonas verdes y espacios para todos los ciudadanos. Se espera que el inicio de las obras se produzca a mediados de este año.

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