El pulpo afronta la recta final antes de la veda con una “alarmante” caída en las capturas

Los temporales del invierno pasan factura a la flota, que tuvo que permanecer amarrada y sin salir a faenar muchos días

En Galicia el descenso llega a los 700.000 kilos y en Bueu el bajón supera los 40.000 kilos

La responsable de Peixes e Mariscos Cartagena, en la plaza de Bueu, muestra un ejemplar de pulpo a finales de semana.

La responsable de Peixes e Mariscos Cartagena, en la plaza de Bueu, muestra un ejemplar de pulpo a finales de semana. / Gonzalo Núñez

La pesquería del pulpo afronta los últimos días de la campaña 2023/24, que se cierra con un “alarmante” descenso en las capturas del cefalópodo y en la facturación. En el conjunto de Galicia esas capturas llegan a 1,5 millones de kilos, que suponen unos ingresos de 14 millones de euros. Unas cifras bastante lejanas a los más de 2,2 millones de kilos y casi 20,5 millones de euros volumen de negocio de la campaña 2022/23. Es cierto que la actual temporada será casi dos semanas más corta de lo habitual, pero eso no explica un descenso tan acusado. “Hasta el mes de diciembre se desarrolló con cierta normalidad, pero la cosa cambió a partir de enero. El mal tiempo y los temporales obligaron a amarrar muchos días y también hubo una reducción de la salinidad del agua”, afirma el patrón mayor de Bueu y presidente de la Federación Provincial de Confrarías de Pontevedra, José Manuel Rosas.

La lonja bueuesa es precisamente una de las referencias en Galicia: el cefalópodo su principal recurso y cuenta con una flota artesanal altamente especializada. La anterior campaña del pulpo se cerró con casi 150.000 kilos y rozando los 1,4 millones de euros en volumen de negocio. Este año, a cinco días de que comience oficialmente la veda, no se llega a los 105.000 kilos y la facturación apenas supera el millón de euros. Entre octubre y enero la evolución fue favorable, dentro de lo que se podría considerar como normal. Pero después de los más de 11.000 kilos del primer mes del año comenzó un declive imparable: 8.422 kilos en febrero, 7.017 en marzo y poco más de 4.707 en abril.

Una descarga de pulpo, el jueves, en la máquina clasificadora de la lonja de Bueu.

Una descarga de pulpo, el jueves, en la máquina clasificadora de la lonja de Bueu. / Gonzalo Núñez

En el caso de la Cofradía de Cangas ese declive es menos pronunciado: 42.413 kilos y 441.700 euros en la presente campaña frente a los 49.000 kilos casi 487.000 euros de facturación de la anterior.

A principios de año los barcos tenían dificultades para salir al mar “siquiera dos días a la semana” por culpa del mal tiempo. Pero ahora ni con una meteorología favorable es posible salir al mar todos los días porque no resulta rentable. “Se sale un día sí y otro no. Muchos vuelven con una media de entre 30 y 50 kilos de pulpo al día”, explican desde el puerto de Bueu. Muy lejos de los topes máximos autorizados para esta época: 55 kilos por barco y día y otros 55 por tripulante enrolado y a bordo, hasta un máximo de 350.

La nueva campaña debe arrancar con "las luces en ámbar"

El patrón mayor de Bueu a diferencia de años anteriores se resiste a hablar de una campaña catastrófica, pero sí que admite que es “nefasta” y que el sector de la nasa, cofradías y Consellería do Mar deben afrontar la próxima temporada –que comenzará el 1 de julio– con “las luces en ámbar” por si es necesario adoptar medidas si esta situación se mantiene.

Pese a este escenario hay motivos para la esperanza. El más importante es que los propios marineros atestiguan que en el mar existe una importante cantidad de cría y alevines de pulpo, lo que en teoría debe asegurar la sostenibilidad de la pesquería.

Los marineros ya comenzaron a apilar en el entorno del puerto de Bueu las nasas antes del inicio de la veda del pulpo.

Los marineros ya comenzaron a apilar en el entorno del puerto de Bueu las nasas antes del inicio de la veda del pulpo. / Gonzalo Núñez

Desde las plazas de abastos ofrecen un diagnóstico muy similar. “La presencia del pulpo cayó bastante y el mes pasado apenas había. Los barcos no eran capaces de salir de la punta del muelle por culpa de los temporales y apenas había capturas”, explica la responsable del puesto Peixes e Mariscos Cartagena, en el mercado de Bueu. El producto que llega a la plaza habitualmente se comercializa en función de tres tamaños: de 1 a 1,5 kilos, a un precio de entre 12 y 13 euros; de 1,5 a 2 kilos, a unos 15 euros; y de más de 2 kilos, que se vende a 17 euros. “Ya no se ve mucho pulpo, pero ahora mismo el que menos se ve es el intermedio, que es precisamente el que quiere todo el mundo”, expone esta placera de Bueu.

La veda comenzará oficialmente el viernes por la tarde. Los barcos tendrán que dejar en tierra todas sus nasas y la pesquería afrontará el paro más largo de los últimos años, con una parada de dos meses. “En plazas como la de Bueu desaparecerá por completo porque aquí es muy difícil ver pulpo de fuera, la mayoría es de la flota local”, apuntan. La vuelta a la actividad de la flota de la nasa está prevista para el lunes 1 de julio.

La charanga Alambique, ayer en su visita a Casa Benito, dentro de las Xornadas de Exaltación do Polbo de Bueu.

La charanga Alambique, ayer en su visita a Casa Benito, dentro de las Xornadas de Exaltación do Polbo de Bueu. / Fdv

Bueu continúa con sus Xornadas de Exaltación do Polbo

La última semana de actividad de la flota del pulpo coincide con la celebración de las Xornadas de Exaltación do Polbo de Bueu, que se prolongarán hasta el domingo 5 de mayo. Hasta 13 establecimientos ofrecen sus especialidades y durante el fin de semana las charangas Noroeste, Alambique y Os Jaláticos se encargaron de amenizar el ambiente con actuaciones musicales. La previsión es poner a la venta cerca de 600 kilos de cefalópodo y uno de los actos más esperados es el homenaje al ilustrador y artista Luís Davila, que será el sábado con la inauguración de una escultura realizada a partir de uno de sus diseños.

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