La Comisión Superior de Urbanismo informa favorablemente a cuatro de los seis ámbitos del borde de litoral propuestos por el Concello de Marín en la documentación del PXOM, quedando rechazados los de las zonas traseras de las playas de Portocelo y Mogor para las que el organismo que informa, estima que la solicitud municipal rebaja la línea de protección a menos de cien metros.

Los núcleos que obtienen luz verde por parte de la comisión son los de Lapamán, la zona trasera de los núcleos rurales de Casás y Teoira; también la de los de Loira y Montecelo y de la zona de Bagüín, entendiendo que se encuentran detrás de núcleos rurales establecidos, los cuales hacen ya de barrera dejando fuera de razón la delimitación a 200 metros medida desde el límite interior de la orilla del mar que marca el Suelo Rústico de Especial Protección de Costas.

Mínimas correcciones

La alcaldesa de Marín, María Ramallo, que expresó un cierto disgusto ante la actitud de otros regidores municipales durante la comisión celebrada en Santiago el pasado jueves, expresando su negativa a los planteamientos de Marín, se mostró ayer moderadamente optimista por el resultado de la votación que originará el informe del Comisión Superior, considerando que las correcciones que haya que hacer ahora son mínimas y sin apenas dificultad y así lo expresó el representante del Equipo Redactor con lo que, por este lado, el PXOM podrá seguir su rumbo sin grandes dificultades siendo ahora la propia consellería de Medio Ambiente la que impulse el trámite del Plan para el que dispone de 3 meses a partir del pasado 5 de marzo.

Otros núcleos

Pero el angosto camino del PXOM no está todavía recorrido porque ahora le toca al análisis de los núcleos de Rural, que son otra incógnita a pesar de que se hizo en ellos una reducción considerable con respecto al momento de la aprobación inicial del documento. El área de expansión y las zonas señaladas como industriales que también están considerablemente reducidas con respecto a la presentación anterior, y serán otros elementos a analizar por la consellería aunque la alcaldesa María Ramallo expresaba ayer su esperanza en que ninguno de estos asuntos pueda hacer retroceder en exceso al PXOM ya presentado y, en todo caso, se puede incluso aprobar condicionado a que se realicen en la documentación ajustes de escasa o relativamente poca importancia para terminar por fin con este asunto que viene rodado desde el año 1978 en que Marín no cuenta con una normativa urbanística realmente seria.