Tras las crecidas, llegan las heladas y el cálculo de daños: entre 50.000 y 100.000 euros en la zona termal

El Miño superó los siete metros y medio de nivel el viernes, a su paso por la ciudad de Ourense, y la crecida en A Peroxa obligó a declarar el estado de emergencia por el riesgo alto de desbordamientos.

Dos días después, ayer, se había desactivado la situación de alerta en A Peroxa, aunque la Dirección Xeral de Emerxencias e Interior mantenía el seguimiento a mediodía. El Miño regresó a su nivel normal en Ourense, según los datos de la Confederación Hidrográfica (CHMS).

Alcanzaba una altura de 4,52 metros a las 19 horas de este domingo, tres por debajo del nivel de prealerta del viernes. En el resto de la provincia, incluido el Arnoia a su paso por Baños de Molgas, los cauces fluviales circulaban dentro de los rangos de normalidad, según los datos de la CHMS.

Superada la crecida, toca evaluar el alcance de los daños en las infraestructuras públicas. En Ourense ciudad habrá que restaurar, una vez más, zonas del paseo fluvial y de los enclaves termales, situados en área inundable.

El alcalde, Gonzalo Jácome, barajaba ayer, a falta de conocer los desperfectos al detalle, que el importe de las reparaciones necesarias rondará entre los 50.000 y 100.000 euros.

Más frío tras mínimas de -5º

Tras las borrascas y las crecidas de los ríos, la tendencia de estos días es anticiclón y heladas. Entre las mínimas gallegas de la jornada del domingo se registraron -4,8 grados en Carballeda de Valdeorras, -4,7 en Manzaneda y A Veiga, -4,4 en Viana do Bolo, -2,8 en Xinzo y -2,6 en Baltar.

Hoy, según Meteogalicia, no habrá cambios significativos en las temperaturas y, de nuevo, se registrarán heladas en el interior.