San José (Nuestro Padre y Señor)

San José (Nuestro Padre y Señor)

San José (Nuestro Padre y Señor) / Pedro Regojo*

Pedro Regojo*

San José para los no creyentes y sobre todo para los creyentes debe ser una fuente de inspiración para una vida plena.

José se da cuenta que María su esposa está encinta. José, que quería tanto a María decide repudiarla en secreto.

José en sueños recibe el mensaje del ángel del Señor y le dice que es obra del Espíritu Santo y por tanto debe de recibir a María en su casa.

Cuántas veces nos precipitamos en nuestras decisiones y no tenemos calma para reflexionar y dar oportunidades a esclarecer las cosas.

José es obediente y hombre justo y cuando el emperador Augusto manda empadronarse a todos sus súbditos para saber cuántos son los que pertenecen a su Imperio, obedece. José y María tienen que hacerlo en Belén porque son de la casa de David. Allí ya sabemos que no hubo posada y a María le llegó la hora del parto y tuvieron que ir a refugiarse a un establo de ganado.

San José no se reveló diciendo como el Hijo de Dios había consentido que su madre dé a luz en un establo. Herodes conoce el nacimiento del Mesías por medio de unos astrólogos de Oriente, los Magos, que se van al palacio de Herodes a preguntar dónde nació el rey de los Judíos.

José tiene que huir a Egipto porque Herodes quiere matar al Niño.

José, María y el Niño se van corriendo a cruzar la frontera para salvar al niño Dios.

José en Egipto experimenta un volver a empezar, en Nazaret estaba cómodo y sus vecinos lo conocían y tenía su reputación.

En Egipto tuvo que volver a empezar y ganar con sus manos el sustento de la familia.

A la muerte de Herodes se volvió a su tierra, su hijo Arquelao había heredado su reino, José decide irse a Nazaret donde el niño Dios pasó toda su vida hasta que comenzó su vida pública a los treinta años. San José es el símbolo del trabajador que aunque cansado siguió en su tarea y enseñó a su Hijo Dios el oficio de carpintero.

Muchas veces tenemos la experiencia de abandonar la tarea o porque estamos cansados o porque nos asfixia la rutina. Qué importante es seguir en la tarea para que sean posibles muchas cosas importantes.

A todos nos llegará la llamada del Señor a la casa del Padre.

A San José le llegó el momento y qué muerte tan placentera, murió entre los brazos de Santa María y de su Hijo Dios.

Le pedimos a San José patrono de la buena muerte que nos ayude a morir en paz con nosotros mismos y con los demás y con el cariño de los nuestros.

*Miembro Club 55