Mira Vigo

Micer: de vindicar el ‘mindfulness’ a una opípara cena en El Mosquito

El cumple del licenciado. Ahí le veis en medio con cara de cumpleaños, del que solo digo que la treintena está demasiado lejos. Al “licenciado Morales”, que veis con barba bajo los anteojos, un grupo de amigos le sorprendieron con un gran cocido felicitatorio en el restaurante Pontedeva. No sale de saraos este Morales, un tipo amigable, solidario, bienhumorado, promotor de encuentros, restaurador de estómagos y gestor de buenas componendas. Noiés pero de Vigueses distinguidos, cabeza visible otrora de los representantes de comercio y ahora del equipo en la Tierra del Cristo de la Victoria, entre otras delegaciones. Le rodean Manolo Vagalume, Juan Fontán, Alberto Millán, Carlos Bueno, Rafael Larriva, Pepe Morales, Manuel Pérez, Luis Piñero, Carlos de Prado, Carlos Crespo, Emilio Fernández y Miguel Fidalgo. Antes había marchado Luis Espada Recarey.

El cumple del licenciado. Ahí le veis en medio con cara de cumpleaños, del que solo digo que la treintena está demasiado lejos. Al “licenciado Morales”, que veis con barba bajo los anteojos, un grupo de amigos le sorprendieron con un gran cocido felicitatorio en el restaurante Pontedeva. No sale de saraos este Morales, un tipo amigable, solidario, bienhumorado, promotor de encuentros, restaurador de estómagos y gestor de buenas componendas. Noiés pero de Vigueses distinguidos, cabeza visible otrora de los representantes de comercio y ahora del equipo en la Tierra del Cristo de la Victoria, entre otras delegaciones. Le rodean Manolo Vagalume, Juan Fontán, Alberto Millán, Carlos Bueno, Rafael Larriva, Pepe Morales, Manuel Pérez, Luis Piñero, Carlos de Prado, Carlos Crespo, Emilio Fernández y Miguel Fidalgo. Antes había marchado Luis Espada Recarey. / Fernando Franco

Fernando Franco

Fernando Franco

¡Qué magnífica tarde de mindfulness pasamos con la palabra en la III Jornada Micer en una atestada sede de Afundación! Organizada por el Centro Médico Micer, que dirige el odontólogo Jacobo Álvarez, habló cada ponente de lo suyo, fuera el catedrático de Psiquiatría Javier Sampayo, la psicóloga Virginia Gastón o el médico internista Roberto Pérez. La palabra llena la boca pero la boca también pide consuelo, y a fe que se lo dimos con una cena para diez en el reservado del Mosquito, donde además de los citados estaban otros ponentes que también participaron en ediciones anteriores: Jessica Fernández y Yago Canalejas, el amigo Lino Álvarez y el publicista Julio César Flores. Puedo prometer que la cena vivida en El Mosquito lo sitúa con sus nuevos propietarios en sus mejores tiempos culinarios y que Sampayo y Virginia Gastón volvieron a Zaragoza felices por ello, como a Madrid Jessica y Yago por lo mismo. Unas ostras de Cambados sin par, una empanada de xoubas insuperable, unas zamburiñas negras de las Cíes para sibaritas, unas navajas de Aldán gozosas, un centollo de la ría bien provisto y un lomo de rape con langostinos. Los postres, acompañados de un vino dulce albariño Sitta Pereiras, de alto standing como el profesional servicio.

En el Palacio de la Oliva, dabuten

Ya envueltos en ese halo mágico que proporciona una suculenta comida nos dirigimos, al lado, a un Palacio de la Oliva ya con cola a la entrada, pero en el que habíamos reservado estratégico espacio. Fascinados quedaron los foráneos por la estética del local y su funcionamiento con un personal siempre atento que ahora cuenta como gerente con los superpoderes organizativos de mi viejo amigo Lolo Picallo, al que yo conocí como DJ en Vigo hace 40 años. Tras una tarde de yoga y mindfulness contra el estrés y sucedáneos, estábamos preparados para el cuerpo a cuerpo de la música y la noche. ¡Bien por el Palacio de la Oliva!

Y de estreno cinéfilo con ‘Tierra’

Pero el día anterior , viernes noche, me fui al último acto de esas jornadas MúsicaV organizadas por el Vitruvia Café y sus coroneles, Javier Ferreiro y Rosana Ojea. Dos días antes había actuado en el auditorio Afundación de Marqués de Valladares con lleno el quinteto de swing de Arnaud Destrés y la clausura que yo viví, también con lleno, fue el estreno por la orquesta 430 de una banda sonora para la película ucraniana del cine mudo (1930) Tierra compuesta por Luke Carradine, que dirigó el cinematogáico concierto. Vi por allí a Juan José Presa, que con tan buen tino se manejaba en los tiempos de la movida en que le conocí como siendo lumínico empresario ahora con la expansión e Routvigo (GLS-Palletways); a Suso Sánchez, de Galide, con más de 30 años de experiencia en control de plagas; a la presi del Ateneo Atlántico, Luisa Abad, que venía del multitudinario encuentro con Yolanda Díaz en la Zona Franca... Ferreiro puede estar satisfecho con la respuesta del público, pero estaba era derrengado ante tanto esfuerzo casi en solitario para conseguir esta jornadas de Música V para Vigo.