La deuda de Cangas con la concesionaria del agua abre el debate sobre una nueva tarifa

El Concello debe 1,4 millones de euros y el año pasado pagó 975.115 por los precios aplicados entre 2015 y 2018

Obras en la red de la UTE Gestión Cangas, en la avenida de Ourense

Obras en la red de la UTE Gestión Cangas, en la avenida de Ourense / Santos Álvarez

Los 1, 4 millones que el Concello adeuda a la concesionaria del ciclo del agua, la UTE Gestión Cangas, obliga a pensar al gobierno local en la conveniencia de cambiar o mantener las tarifas actuales, que no son las que figuraban en el contrato, razón por la que la empresa no deja de ganar sentencias en los tribunales de justicia. Ahora mismo la cosa está así. Cangas pagó el pasado año 975.115 euros por las tarifas que se aplicaron entre 2015 y 2018 y le resta pagar 1,4 millones de euros hasta 2022, por lo que vendrán más sentencias por las de los años 2023 y 2024. De 2015 y 2016 faltan r pagar 300.000 euros, incluidos los intereses, como también los de 2017 y 2018 (45.000). Hay una reclamación de sentencia firme de 2019 y 2020 por 550.00 euros y la empresa reclama 242.000 y 225.000 de 2021 y 2022.

Se puede decir que el Concello de Cangas está subvencionando el agua a los vecinos. No paga el consumidor la tarifa directamente, pero después la paga con sus impuestos cuando llegan las sentencias. Ahí se abre el debate. Se puede mantener la situación así más años o hay que negociar ya con la UTE Gestión Cangas. La concesionaria ya mantuvo varias reuniones con el gobierno en este sentido. Pero también con los anteriores. Considera que lo mejor para las partes es llegar a un acuerdo para establecer unas nuevas tarifas. El Concello sabe que el dinero que se destina a pagar sentencias de este tipo podía ir destinado a otros servicios tendentes a mejora la vida de los vecinos. Ahora mismo el gobierno local no tiene una mayoría suficiente como para modificar las tarifas, que siempre supondrían un aumento, además este movimiento acarrearía un coste político importante, que es muy difícil afrontar en solitario. Además, el PP hace tiempo que está en contra, pese a que fue este partido quien estaba en el poder cuando se firmó el contrato de la UTE Gestión Cangas donde figuraban unas tarifas más altas, que meses después se rebajarían en un pleno. Tampoco lo está AV, partidario de que este servicio se municipalice. De hecho, en el anterior mandato, los ahora miembros de AV se movieron en este sentido.

Europa obliga a una nueva ordenanza que elimina el pago del consumo mínimo

Lo que sí está obligado el Concello de Cangas es a adaptar la ordenanza del cobro de la tasa del ciclo del agua a la normativa europea. En esta tarea trabaja el gobierno municipal en colaboración con la UTE Gestión Cangas. La principal novedad es que se elimina el consumo mínimo, ese que se establecía en todas las ordenanzas. Así que se pagará siempre en función del consumo. Esta nueva reglamentación a quien beneficia es a los propietarios de pisos o casas cerradas, que ahora pagan un mínimo, aunque no hubiera consumo. Son principalmente los propietarios que tiene las viviendas destinadas solo a uso vacacional. Esta normativa europea es de obligado cumplimiento, pero aún no se sabe qué plazo de tiempo tiene el Concello para modificar la ordenanza municipal en este sentido. Es asunto tiene que ser aprobado por el pleno. Por otra parte, la concesionaria del ciclo del agua llevaba desde hace tiempo utilizando una finca muy cerca del depósito de Cimadevila. Allí almacenaba parte de sus existencias. El propietario de la finca mostró sus quejas y ahora el Concello de Cangas medió para que establecer un alquiler que la concesionaria del ciclo del agua tendrá que pagar al dueño de la finca. En este sentido, el viernes las partes mantuvieron una reunión en el Concello de Cangas.

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