Vecinos de Domaio piden la retirada de las piedras que quedan al lado de la nueva senda

Alertan del riesgo de derrumbe que supone su estado actual

Las piedras y los eucaliptos que piden retirar.   | S.A.

Las piedras y los eucaliptos que piden retirar. | S.A. / Fran G. Sas

La Consellería de Infraestruturas tiene en obras buena parte del trazado de la carretera general que atraviesa Moaña, la PO-551. Una de las actuaciones en marcha es la senda peatonal y ciclable por la margen del litoral que conecta las parroquias de Meira y Domaio. La Asociación de Veciños Monte Faro de Domaio solicitó a la Xunta que, aprovechando esa obra, se retiren las piedras ubicadas cerca de A Cerradiña y que suponen un pequeño trozo de monte al lado del nuevo paseo.

Este colectivo alerta del peligro que supone dejar las piedras con los eucaliptos en su estado actual, pues podrían desplomarse sobre el paseo. Además, también considera que sería un riesgo porque permitiría la creación de un vertedero de basura incontrolada en el entorno, toda vez que varias zonas forestales de Moaña cerca de las carreteras llevan años sufriendo estos problemas de vertidos de escombros o muebles de viviendas.

La construcción de este paseo entra dentro del Plan de Sendas de Galicia financiado por la Consellería de Infraestruturas. La de Domaio, que conecta los barrios de Moureira y Palmás, tiene un coste total de 1,5 millones de euros y los trabajos arrancaron en el pasado verano. Contará con un trazado de 2 kilómetros lineales y la senda se convertirá a su vez en un gran mirador sobre la ría de Vigo.

Los trabajos los está ejecutando la empresa Petrolam SL y la previsión es que cuente con varios tramos voladizos y todo el espacio para peatones y ciclistas cuenten con un ancho superior a 1,5 metros. Incluye una zona ajardinada.

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