Fue el domingo, 17 de noviembre, cuando en Portugal comenzó, a la altura de Sagres, en el sur de país, el seguimiento del narcosubmarino. Las autoridades lusas habían recibido una información de que una embarcación del narcotráfico se acercaba a su costa para realizar un transbordo de droga en el sur y que hace quince días emprendieron la investigación del submarino con el apoyo de la Marina y de sus Fuerzas Aéreas. Desde Sergues, y quizás con la tripulación alertada, de que la seguiría, el submarino inició una ruta hacia el norte del país y Galicia. La nave estaba a 300 millas de la costa lusa, sin tocar tierra y sin realizar transbordos de l droga. Cuando entraban en Galicia, la autoridades portuguesas contactaron con las españolas y se estableció un operativo con 240 integrantes procedentes de las Unidades Antidroga de la Guardia Civil (140), de la Policía Nacional (80) y de Vigilancia Aduanera (40). En el operativo participaron cuerpos del Reino Unido y policías de Brasil y Estados Unidos. Supuestamente, el submarino había salido de Brasil.
