El Gobierno español prevé recurrir antes del 19 de noviembre, es decir dentro de un plazo de cinco semanas, las vedas a la pesca de fondo de 87 zonas del Atlántico nororiental impuestas por la Comisión Europea (CE), pero estarán vigentes por lo menos hasta 2023. España ultima el recurso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) contra la decisión de la CE pero aún no está clara la fecha de presentación, si bien será “como tarde” el 19 de noviembre, según han informado fuentes del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. En ese fecha se cumplirán los dos meses que el Gobierno tiene de plazo para impugnar la norma, es decir, los dos meses desde que fue publicada en el Diario Oficial de la UE.

Las vedas impiden faenar a más de 400 metros de profundidad y perjudican directamente a 59 barcos españoles dedicados al palangre de fondo (a especies como merluza de pincho), según declaraciones a la prensa de las citadas fuentes ministeriales. Los servicios jurídicos de Agricultura trabajan con los del Ministerio de Asuntos Exteriores para presentar y fundamentar el recurso, con el objetivo de que la CE reconsidere una medida que, a juicio de España, “está mal formulada” y va más allá de lo necesario para proteger los ecosistemas.

Al margen del recurso del Gobierno, la Organización de Productores Pesqueros del Puerto de Burela también formulará el suyo propio. Los dieciséis barcos de palangre de fondo de esta entidad están duramente afectados por el reglamento comunitario.