Las "catedrales del tiempo" de Vigo: una ruta por las iglesias más antiguas

Aunque la ciudad olívica cuenta con un puñado de iglesias que han cumplido varios centenarios, hay tres templos que hunden sus raíces históricas en el siglo XII y que todavía conservar elementos de su configuración original

Tímpano de la iglesia de Bembrive con cruz pagana.

Tímpano de la iglesia de Bembrive con cruz pagana. / De Arcos

La Semana Santa se presenta con un pronóstico poco apacible para los planes al aire libre, como la playa o la montaña. Sin embargo, Vigo presenta multitud de alternativas deportivas y culturales que no se ven tan afectadas por las inclemencias meteorológicas, ya que permiten alternar el cielo abierto con la actividad a cubierto. Aprovechando la festividad religiosa, destacamos tres auténticas joyas del patrimonio religioso de la ciudad que se pueden (re)descubrir estos días.

La urbe presume de un puñado de iglesias centenarias, pero hay tres que destacan por su antigüedad. Hunden sus raíces en la Edad Media y todavía conservan elementos de su configuración original. De estilo románico, mantienen su actividad con iglesias parroquiales y dos de ellas son el epicentro de dos de las romerías más populares de la ciudad. Son las "catedrales del tiempo" de Vigo.

La Iglesia de Santa María de Castrelos.

La iglesia de Santa María de Castrelos. / Ricardo Grobas

Santa María de Castrelos

Una piedra fundacional registra 1216 como año de la construcción de este templo, que pertenece al románico tardío y es una de las iglesias más hermosas de Pontevedra por su variada ornamentación. Compuesta por una sola nave, todos sus muros son ricos en elementos.

La puerta occidental consta de tres arquivoltas, sujetas por tres parejas de capiteles de motivos vegetales. En el conjunto se pueden apreciar flores de seis pétalos inscritas en círculos, que a su vez guardan un tímpano con una cruz patada rodeada de seis pequeños árboles que terminan con una bola en su copa.

Sobre esta entrada principal se encuentra una ventana de arquivolta con columnas encapiteladas. El resto de los muros son similares en riqueza y decoración, a los que hay que sumar el ábside, que en lugar de tener los habituales ventanales se abre en tres rosetones.

La indiscreta toponimia nos indica que fue construida en las inmediaciones de un asentamiento castrexo. Perteneció a la Encomienda de Beade, parroquia próxima, inscrita a la Orden Militar de San Juan de Malta.

Consagrada a la Virgen María celebra sus fiestas a finales de enero, principios de febrero con la Candelaria. En la actualidad consta del máximo nivel de protección patrimonial, la declaración de BIC.

La iglesia de Santiago de Bembrive.

La iglesia de Santiago de Bembrive. / Cameselle

Santiago de Bembrive

Una de las muestras más representativas de la arquitectura religiosa de Vigo es la iglesia de Bembrive. Construida en el siglo XII según los cánones del románico, tan extendido en Galicia y del que tan solo quedan tres ejemplos en la ciudad, junto a Castrelos y Coruxo.

Por la toponimia del lugar sobre el que se asienta, "Mosteiro" algunos estudios apuntan a que se haya erigido sobre un templo más antiguo consagrado a la actividad monástica.

No sería esta la única señal de las vidas pasadas del edificio, puesto que algunos detalles de su fachada revelan reminiscencias celtas: el tímpano presenta una cruz de origen pagano y en el interior se encuentran símbolos precristianos como espirales y círculos.

La parroquia celebra su patrón el 25 de julio, al estar dedicado el templo a Santiago Apóstol. Además de esta fecha, otra gran festividad se celebra en la parroquia, de gran popularidad y concurrencia: San Blas, a principios de febrero.

Además, el templo cuenta con la máxima categoría de protección patrimonial, fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC) en 1980.

La iglesia de San Salvador de Coruxo.

La iglesia de San Salvador de Coruxo. / Marta G. Brea

San Salvador de Coruxo

La iglesia de San Salvador de Coruxo es el último vestigio de templo románico en la ciudad que ha llegado hasta nuestros días. Erigida en el siglo XII como monasterio benedictino que pasaría a depender de congregación de Celanova para pasar más tarde a la de Tui. Pero el siglo XIV marcó su ocaso, bajo el tremendo empuje del Monasterio de Oia. A partir de entonces se decayó en iglesia parroquial.

De su primigenia presentación románica tan solo se conservan los tres ábsides semicirculares escalonados con ventanas y curiosos detalles figurativos. Algunos de forma "antropomorfa" y que ha llevada a algunos a ver a "Adán y Eva" en esas figuras.

Desafortunadamente las reformas hicieron tapiar los ventanales y se perdieron más elementos decorativos. Se abrieron dos nuevos ventanales para obtener más luz, pero lejos del estilo y la disposición propios del románico.

Completan este conjunto un cruceiro y una fuente que se encuentran al lado del templo.