El temor a los topes del alquiler vuelve a hundir la oferta: 50 menos en 2 semanas

Propietarios de la ciudad han retirado sus viviendas del circuito de arrendamiento por el efecto que pueda tener la Ley por el Derecho a la Vivienda. Y es que, el próximo miércoles, entrará en vigor la limitación de precios al alquiler, amparada por la nueva normativa con la intención de reducir las cuantías que se exigen a los inquilinos. En todo caso, no se notará en Vigo, al menos, por ahora, puesto que el Concello, a diferencia de Santiago, A Coruña o Pontevedra –en los tres casos, a propuesta del PSdeG–, rechaza solicitar esta medida. La Xunta mostró su oposición en un inicio, pero, más tarde, se abrió a aplicarla.

Basta con visitar los portales inmobiliarios para ver este efecto. En Idealista, uno de los más empleados en la búsqueda de un hogar, se mostraban ayer por la tarde 461 ofertas de pisos y casas en alquiler, en torno a 60 menos que hace un par de semanas –lo habitual es que se ronden los anuncios–. Sucedió lo mismo en mayo del año pasado, antes de la entrada en vigor de la nueva normativa, y, tiempo después, se restableció la cantidad. Precisamente, a finales de febrero, el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana desveló el Índice de Precios de Referencia, que limitará el importe de los alquileres de viviendas en aquellas áreas que las comunidades autónomas declaren como zonas tensionadas.

La limitación se aplicará a los llamados grandes tenedores, es decir, propietarios de más de cinco o 10 viviendas, según la decisión de los gobiernos autonómicos, y a los titulares de casas y pisos que se incorporen por vez primera al mercado de alquiler en zona tensionada y que no hayan sido arrendadas en los últimos cinco años. Este índice es de base tributaria, por lo que se ha utilizado la última declaración de la renta de los distintos propietarios. Según Idealista, el precio medio del metro cuadrado en Vigo nunca había sido tan alto como ahora: 9,8 euros en febrero, un 5,5% más que en el mismo mes de 2023.

Según la ley estatal, podrán declararse zonas tensionadas aquellos municipios o áreas que cumplan uno de estos dos requisitos: que la carga media del coste de la hipoteca o el alquiler en el presupuesto familiar, más gastos y suministros básicos, supere el 30% de los ingresos medios del hogar o que el precio del arrendamiento haya experimentado en los cinco años anteriores un porcentaje de crecimiento acumulado superior al menos tres puntos al alza del IPC.

El estudio del Instituto Galego da Vivenda e Solo (IGVS) indica que el arrendamiento podría limitarse en 15 barrios de Vigo porque cumplen las condiciones que marca la ley de vivienda. Se encuentran en Oia, parte de Coruxo y de Candeán, Navia, zonas de Valladares, el centro, Lavadores, Bembrive, Cabral y Teis. Sin embargo, el Concello, por ahora, no ha mostrado su voluntad de pedir a la Xunta la declaración de zona de mercado residencial tensionado. Opta por otro camino: limitar nuevas actuaciones de pisos turísticos y apostar por las viviendas de protección.