“Os cartos públicos teñen que ir destinados á sanidade pública, non poden continuar indo a parar aos petos das grandes multinacionais”, opina el Bloque Nacionalista Galego. Por ello, su portavoz en el Parlamento, Montse Prado, se opone a que se aumente el canon que recibe la concesionaria del Hospital Álvaro Cunqueiro y reclama su rescata.
Tal y como adelantó FARO, la concesionaria Novo Hospital de Vigo, con un fondo francés y otro luxemburgés como principales accionistas, reclama al Sergas una subida de su canon en diez millones para compensar el alza en la inflación. Sus socios se repartieron más de 7 millones de euros en concepto de dividendos con cargo a los beneficios de 2020 y 2021.
El frente nacionalista exige la realización de una auditoría de la gestión llevada a cabo por la UTE, así como rescatar la concesión para “o converter nun hospital cento por cento público”. Prado recordó que el canon no ha dejado de crecer, pasando de los 56,33 millones a los 65,39 de 2022. “É claro que este modelo é un pésimo negocio para o público e moi bo para as grandes empresas”.
