La Xunta destina 2,7 millones a implantes para hernioplastias: hacen 6.350 al año

La Xunta realiza la compra centralizada de implantes digestivos con biomateriales por 2,7 millones de euros para una de las operaciones “estrella” en Galicia: las hernioplastias con malla, de las que se realizan cada año 6.350; es decir, unas 17 cada día. Estas estructuras, similares a la red de un pescador pero con los orificios ínfimos –de milímetros o menores– sirven para reforzar el tejido de la pared abdominal tras una cirugía de hernia y en ellas acaba integrándose el propio tejido del paciente. “Se registra una recidiva [reaparición de una enfermedad ] mucho menor”, explica el cirujano gallego Salustiano González. Desde la introducción del polipropileno en 1960 para esta técnica, el uso de materiales como el fluoruro de polivinilideno (PVDF) o el politetrafluoroetileno (PTFE ) ha registrado un gran avance, explica, hasta materiales hidrofílicos de primera calidad y última generación.

Según datos del Ministerio, junto con la extirpación de la vesícula biliar, las cirugías de la patología herniaria y del apéndice están en el top de las más realizadas. Y dentro de las operaciones ambulatorias –aquellas que no requieren ingreso– las operaciones de cataratas, una de las causas más comunes de pérdida de visión, se llevarían la palma con más de 21.000 intervenciones anuales en Galicia.

El Consello de la Xunta autorizó ya la contratación del suministro sucesivo de estos implantes digestivos con destino a las áreas sanitarias del Sergas para un período de tres años, más otros dos de prórroga, y con un presupuesto de 2,7 millones euros –y cuyo valor estimado es de 4,6 millones– siendo la primera contratación centralizada para este tipo de material, siguiendo la línea iniciada por la Consellería de Sanidade.

Esta licitación “surge de la necesidad de satisfacer la demanda asistencial de las siete áreas sanitarias del Sergas de diferentes tipos de implantes digestivos, mallas quirúrgicas, en forma de prótesis, constituidos por biomateriais sintéticos que tienen por finalidad cambiar parcial o totalmente los tejidos dañados”, justifica el doctor González Vinagre. La malla sirve para reforzar la zona debilitada y proporcionar estabilidad a largo plazo, puesto que actúa como una estructura para el crecimiento del nuevo tejido.

Existen multitud de mallas según la indicación y técnica quirúrgica, bien sea cirugía abierta o laparoscópica. Así hay mallas para hernias inguinales, para hernias de hiato, para cirugía intraperitoneal, peritoneal, para hernias paraestomales, ventrales, o umbilicales...

Y, desde la administración sanitaria indican que entre los objetivos de esta contratación, además, de garantizar la continuidad del suministro de estos productos sanitarios implantables está “mejorar su precio de adquisición”, evitando de esta manera variaciones significativas del mismo entre los distintos centros hospitalarios del Sergas. Así, estiman con la compra centralizada una reducción media de los precios actuales de compra de un 11%, “lo que supondrá un ahorro de cerca de más de 107.000 euros cada año”, alegan. También se pretende con esta contratación la homogeneización del número de referencias por artículo dentro del catálogo de productos del Sergas. Y aunque se reduzca el precio de compra, está garantizada la máxima calidad de las mallas, insisten.