Los peritos policiales se ratifican en sus atestados en la última sesión del juicio del Alvia antes del parón navideño
La jornada de hoy, la más corta en lo que va de juicio, se ha zanjado en minutos
La última sesión del juicio del Alvia antes del parón navideño ha sido la más corta de este procedimiento hasta la fecha y se ha zanjado en minutos, después de que los peritos policiales que comparecieron en la vista se hayan ratificado en sus informes.
Uno de los agentes firmaba un atestado en el que contaron con el asesoramiento de cinco técnicos de Renfe y Adif. "No somos especialistas en las herramientas de Renfe, ellos sí lo son; esto es algo muy específico y hace falta gente muy específica", afirmó el agente.
Otro de los comparecientes, agente del Cuerpo Nacional de Policía que es perito informático forense, confirmó también las conclusiones de su informe, consistente en extraer y autentificar los datos de las cajas registradores. La información contenida en esas cajas negras fue entregada a los ingenieros especializadas para su estudio, análisis que fue supervisado por la Policía Científica.
La sesión ha acabado a las diez de la mañana. Tras jornadas que duraron horas y que, en muchos casos, se alargaron hasta la tarde, esta ha sido la más fugaz. "Se da por terminada la sesión, unos días tanto y otros tan poco", ha afirmado la jueza al término de esta jornada. La vista oral, que arrancó en octubre, se interrumpe ahora hasta después de las navidades.
Se retomará el 10 de enero y durante ese primer mes de 2023 y hasta el 8 de febrero comparecerán el resto de peritos citados, algunos claves de cara a dictar sentencia por el accidente ferroviario de Angrois. Finalizada la prueba penal, arrancará, el 14 de febrero, la civil.
En las dos jornadas de esta semana, la Abogacía del Estado intentó cimentar su tesis de que era imposible para dirección de Seguridad del Adif prever el riesgo en la curva en la que descarriló el tren. “No había ningún indicio de accidentes de este tipo. No había historial para sostener que estábamos en una situación de riesgo. Nadie se lo podía plantear porque no había ocurrido nada que te hiciera que lo pudieras plantear. A veces la seguridad funciona de esa manera”, sostuvo, por ejemplo, Pedro Luis Ruiz Acosta, el técnico de Ineco –dependiente del Ministerio de Transportes– que redactó el informe de riesgos de las medidas mitigadoras implantadas tras el siniestro de Angrois.
La juez da por terminada la sesión.
Un hombre relata las secuelas que el siniestro tuvo para su madre. Explicó cómo desde 2013 a 2016 se sucedieron las intervenciones en brazos y piernas y cómo desde el siniestro le fue “imposible recuperar su vida”. “Tenía una vida completa”, reseñó, y a partir del siniestro “la tuvo que dejar”. “Ha tenido que cambiar de vida, de hábitos, de todo. Y nosotros”, remachó.
Los hijos de un matrimonio lesionado en el encuentro explican que se enteraron a medianoche de a qué hospital los habían enviado tras contactar con los centros por vía telefónica. Cuentan cómo, en el caso de su madre, todavía se queda “paralizada” cuando escucha un ruido fuerte. “De lo único que se acuerda fue del ruido que escuchó y luego el silencio que había después”, comentan. Sobre su padre, ya fallecido, cuentan que perdió mucha movilidad tras el suceso o cómo “empezó a tener problemas psicológicos”.
Comparece un sobrino de dos fallecidos en el siniestro, que explica las relaciones estrechas que estos mantenían con su familia.
El marido de la anterior víctima explica que no pudo trabajar más tras el siniestro. "Aunque quisiera, no pudo", afirmó.
- Bono Activa Comercio 2024: cómo se solicita y en qué tiendas se puede utilizar
- La Xunta le dará la vuelta a la FP el próximo curso
- La Guardia Civil quiso investigar la muerte de los padres de Rosario Porto pero la cremación lo impidió
- El Sergas dependerá de la secretaría xeral de Sanidade para “una mejor coordinación”
- La FP que viene: más prácticas y ya en 1º, más inglés y optativas para afinar la capacitación
- El miedo a las multas sitúa en máximos las fianzas de alquileres custodiadas por el IGVS
- Las pruebas para bomberos: no miden la valía para la profesión, excesivas y pensadas solo para los hombres
- La incorporación de la mujer al mercado laboral deja a las “amas de casa” en mínimos