Wofco apuntala su crecimiento y engorda flota con dos atuneros más para el Pacífico

La firma viguesa se hace con el “Belle Rive” y el “Belle Isle”, dos unidades de 90 metros compradas a Sapmer

Operarán bajo pabellón de Panamá y se unen al “Ría de Aldán”

El atunero "Belle Rive", ahora de Wofco, durante un amarre en Seychelles.

El atunero "Belle Rive", ahora de Wofco, durante un amarre en Seychelles. / C. L.

Una de las grandes protagonistas de la expansión global de la pesca gallega, Worldwide Fishing Company (Wofco), continúa su proceso de crecimiento. En medio de una situación crítica para el sector, que sufre por la caída ventas o pérdida de márgenes, y en el que las armadoras se están desprendiendo de parte de su fuerza extractiva, la empresa viguesa va a contracorriente. La compañía que dirigen Borja Tenorio y Alberto Barreiro redobla su apuesta por la industria de los túnidos e incorpora dos nuevas unidades. Tras la llegada del atunero congelador Ría de Aldán, Wofco vuelve a “pescar” en la francesa Sapmer, en pleno proceso de desinversión, con la incorporación de los barcos Belle Rive y el Belle Isle, que dejarán el Índico para trabajar ahora en el océano Pacífico.

El atunero "Belle Isle", ahora de Wofco, en Seychelles

El atunero "Belle Isle", ahora de Wofco, en Seychelles / C. L.

Pese a deshacerse este año del palangrero Matilda –que trabaja ya en aguas del polo sur bajo bandera de Namibia y con el nombre Helena Ndume–, Wofco no quiere dejar de lado la pesca extractiva, en este caso en un sector que ahora está en un momento delicado como es el del atún.

Las dos nuevas unidades pertenecían a la francesa Sapmer, que al igual que otras armadoras galas del atún se está deshaciendo de parte de su flota para intentar hacer más viable el negocio. En este caso, los dos barcos fueron construidos hace diez años en las instalaciones vietnamitas del grupo de astilleros Piriou y cuentan con 90 metros de eslora por 14,5 de manga.

Destino

Según pudo saber FARO, ambos atuneros dejaron ya su puerto base en Mauricio para navegar rumbo a su nuevo destino. El Belle Rive se dirige directamente hacia el puerto ecuatoriano de Manta, desde operará al igual que hace el Ría de Aldán, anteriormente conocido como Manapany y que pertenecía a la misma armadora francesa. En cuando al Belle Isle, el buque se dirige a Galicia y, en concreto, llegará a Marín para ser ligeramente reformado en las instalaciones de Nodosa Shipyard, como ya sucedió con el primero de estos tres atuneros.

Fue precisamente este año cuando la empresa creó una filial específica para operar esta flota, bautizada como Aldán Pacific, al igual que una nueva división llamada Wofco Fisheries, de la que por el momento no hay mucha información más allá de que gestionará la operativa de cinco palangreros, sin especificar cuáles. Hasta la llegada del Ría de Aldán, y con la salida del Matilda, el único barco que figuraba –y figura– en la web de la firma era otro atunero, el Aleshka, en este caso de casi 57 metros y bandera marroquí.

Ficha del atunero "Aleshka" en la página web de Wofco

Ficha del atunero "Aleshka" en la página web de Wofco / Wofco

La joven pesquera viguesa, que por el momento ha declinado hacer declaraciones sobre esta operación, apuntala de esta forma su brazo extractivo mientras resuelve la escasez de capacidad para elaborar tanto pescado. Después de la reciente retirada de la puja sobre las instalaciones de Fandicosta, Wofco centra sus planes en aumentar espacio de elaboración por partida doble: por un lado, con la factoría para elaborar 40 toneladas diarias de langostino que levanta en Paraguay; por otro, retomando el plan perfilado en Redondela para levantar unas modernas instalaciones en los antiguos terrenos de Aucosa, en Rande.

Recreación de las futuras instalaciones de Wofco en los terrenos de Aucosa, en Rande

Recreación de las futuras instalaciones de Wofco en los terrenos de Aucosa, en Rande / Wofco

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Wofco se ha convertido en la cuarta pesquera del país y su crecimiento, pese a su juventud, parece imparable. De hecho, la previsión que manejaba la compañía a mediados de verano era la de acabar el año con un aumento del 20% en ventas, alcanzando así los 500 millones de euros. Para continuar su expansión, la empresa necesita incrementar superficie de elaboración y, si nada lo cambia, “replicará” en Rande las instalaciones que Fandicosta tiene al otro lado de la ría, en Moaña, por las que decidió no pujar más. Según informa la propia Wofco a través de un nuevo vídeo corporativo, la empresa se adentrará en la elaboración por partida doble con la nueva planta para langostino en Paraguay y con una nueva planta en Punta Chapelisa, Redondela, zona que durante años ocupó Aucosa.

La pesquera refería hace un mes que su intención era la de “adaptar y reacondicionar las instalaciones existentes” con la idea de “realizar una fuerte inversión y poner en marcha una instalación frigorífica y de elaboración de pescado”. Unas palabras que estaban vinculadas a la confirmación por parte del Tribunal Supremo de la legalidad de la licencia urbanística municipal otorgada en su momento a Aucosa para la ampliación y modernización de sus instalaciones.

Hasta ahora, Wofco no había trasladado sus planes concretos sobre estos terrenos adquiridos hace más de un año, pero ahora desvela que la idea es la hacer una planta de procesado de 4.000 m² y un centro logístico de 6.500. En total, más de 10.000 m² en los que podrá procesar 40 toneladas de pescado al día y almacenar 11.500 pallets.

Mientras la firma que dirigen Borja Tenorio y Alberto Barreiro avanza en Rande, en Domaio Fandicosta encara la recta final del preconcurso, que pidió el 15 octubre, a menos que el juez dé el visto bueno a una prórroga. Por el momento, la única empresa que está en la puja es Interatlantic Fish, el grupo que comanda Luis Cabaleiro.

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