Francisco Vilariño: “El PP no atendió las necesidades prioritarias del municipio”

El líder del Bloque asegura que este mandato tuvo “un gobierno sin proyecto | Añade que se dieron pasos atrás en materia de urbanismo y de transparencia en la contratación

Ariadna Fernández, Francisco Vilariño, Antía Pavón y Manuel Carbón hicieron balance del gobierno local.

Ariadna Fernández, Francisco Vilariño, Antía Pavón y Manuel Carbón hicieron balance del gobierno local. / SALOMÉ SOUTELO

Salomé Soutelo

Salomé Soutelo

El portavoz del BNG de Lalín, Francisco Vilariño, ofreció ayer un balance de la gestión municipal del PP en estos tres años y medio de mandato. Estuvo acompañado por Ariadna Fernández, Antía Pavón y Manuel Pavón.

Para el Bloque, el grupo de gobierno “ignora a la mayoría social, que no es una prioridad” para un ejecutivo “sin proyecto y cuyos miembros están más preocupados de sus peleas internas que en gestionar recursos públicos”. Añade que el único nexo de unión de los 11 ediles que conforman el gobierno popular son “los salarios millonarios que perciben”. Vilariño insiste que este mandato “fueron años perdidos, porque las necesidades realmente prioritarias para nuestro municipio no fueron atendidas por el PP”: Pone como ejemplos la falta de suelo industrial para la instalación de nuevas empresas o la ampliación de las ya existentes o el “despropósito de ir al revés de todos los municipios” en materia de urbanismo, ya que Lalín defiende “un modelo arcaico, caótico y con muchas calles en muy mal estado”. El portavoz del Bloque también echa en falta políticas específicas en materia de juventud, igualdad, deporte, medio ambiente o cultura, entre otras áreas.

Deterioro de la asistencia sanitaria

En el apartado económico, el BNG teme por el estado en que quedarán las arcas municipales cuando remate el mandato, “con un escandaloso abuso de contratos menores”, que en muchos casos fueron reparados por Intervención y que suponen “saltarse los mecanismos de transparencia y control”, como señaló la oposición política en el pleno del pasado viernes. “Es normal que no se atiendan las demandas de la ciudadanía, cuando lo importante para ellos es gastar 100.00 euros en orquestas o 40.000 en subirle el salario a cuatro funcionarios”, ironiza Vilariño.

Por áreas, en sanidad lamenta la carencia de una ambulancia medicalizada, el retraso en el remate del Centro Integral de Saúde y el deterioro progresivo del centro sanitario actual. Añade el aumento de las listas de espera o la supresión de especialidades.

Sin elecciones a pedáneos

En servicios sociales, Vilariño recuerda los conflictos continuos por el Servizo de Axuda no Fogar (SAF). Su privatización por 5 años, el máximo que permite la ley, “no refleja una mejora ni en el servicio ni en las condiciones laborales de las trabajadoras”.

Por lo que se refiere a las garantías democráticas, fue otro paso atrás, como en materia de urbanismo, ya que el PP suprimió las elecciones a alcaldes y alcaldesas de barrio en las parroquias del rural, un sistema que había puesto en marcha el anterior gobierno de coalición y a propuesta, precisamente, del Bloque. “El gobierno de José Crespo quiere enterrar ese logro para volver a los tiempos más oscuros de clientelismo político del aparato del PP”, asegura. Añade que ha llegad la hora del cambio real y de que el BNG está en disposición de liderarlo.