La última previsión que manejaba el gobierno local de A Estrada en relación a la apertura de las cuatro pistas de pádel en el frontón municipal era la de poder abrir las nuevas instalaciones al público el próximo mes de septiembre. Pero el plazo podría demorarse una vez más -en un principio se pensó que podrían estar ya listas para su uso este mes- debido a que está aún pendiente de otorgarse el correspondiente permiso municipal para poder iniciar la actividad.

Preguntado al respecto del estado del proyecto, el alcalde estradense, José López Campos, señala que los técnicos municipales se encuentran en estos momentos realizando la tramitación de la licencia urbanística. La duda está en si es la empresa la que debe pedirla o ha de aprobarse como proyecto municipal, dado que la instalación se encuentra en un recinto de titularidad municipal. "Lo están viendo los servicios jurídicos para decidirlo", apunta. "Sea de una manera o de otra, tenemos que licenciar de forma rápida" -admite el mandatario local-, dado que Mantecer S.L., la empresa con sede en Arteixo que resultó adjudicataria de la construcción y gestión de estas instalaciones deportivas, "ya tiene todo el material para las pistas" en las dependencias de la firma, según sostiene López Campos.

En realidad, las obras de acondicionamiento del frontón municipal para albergar las pistas de pádel comenzaron ya el pasado mes de junio. Lo hicieron en el interior del pabellón y, al tratarse de "una obra menor", de reforma, no fue preciso otorgar licencia alguna, según señala el alcalde, quien asegura que los trabajos de acondicionamiento dentro del recinto ya están concluidos. Queda ahora pendiente la propia instalación de las pistas y la construcción de un "pequeño módulo" exterior, en la entrada del pabellón, para habilitar una zona de recepción y una cafetería. Se trata de "una estructura prefabricada de muy fácil ejecución", en palabras de López Campos.

"Una vez concedamos licencia, las obras estarían hechas en seis semanas", asegura el regidor. Y es que, según explica, el Concello debe otorgar licencia urbanística de obra para la construcción del módulo que albergará la recepción y la cafetería y también para que la empresa pueda instalar las pistas. Además, la administración local tendrá que conceder licencia de actividad para que las instalaciones puedan abrir al público.

La concesión otorgada a la empresa adjudicataria de las obras de acondicionamiento y gestión de las instalaciones es de doce años y medio. Concluido ese tiempo, las dependencias revertirán en el Concello, que ingresará 12.280 euros al año en concepto de canon por parte de la firma y dispondrá de 80 horas semanales para el uso municipal de las instalaciones.

Los usuarios pagarán, de lunes a viernes, 1,80 euros por persona y hora si utilizan las pistas entre las 9 y las 13 horas. Los que acudan de 13 a 18 horas abonarán 2,70 euros, mientras que la tarifa del horario entre las 18 y las 23 horas será de 3,70 euros. El precio del fin de semana y de festivos es de 7 euros por persona y hora.