El Arosa va a tener que sudar esta tarde en Vilaxoán (17.00 horas). El club arlequinado se mide a un Racing Vilalbés que destaca por su gran capacidad defensiva y, sobre todo, por tratarse de un equipo que acostumbra a rentabilizar las pocas ocasiones que crea ante el marco contrario. De esa fortaleza que lucen los vilalbeses es consciente el técnico del Arosa, Rafa Sáez, que se espera un encuentro muy complicado, con un rival que "va a ofrecer un gran rigor táctico y que va a conceder muy poco cerca de su área".
Conseguir superar al Racing Vilalbés va a ser "un ejercicio de paciencia, porque el encuentro va a ser de guarismos cortos, vamos a tener que sudarlo y desgastar al rival a través del control del balón, teniendo mucho cuidado con los balances defensivos, porque si se ponen por delante, es un equipo que cierra muy bien los espacios al trabajar de forma muy seria en defensa". Además de las virtudes defensivas, Sáez destaca del rival la pegada que ofrece al contraataque. "Son expertos en la recuperación y en transiciones rápidas, con jugadores de banda muy potentes, caso de Varela, y con un delantero que juega muy bien de espaldas a la portería, que es Cuadrado". La capacidad defensiva que ofrece el Vilalbés se demuestra con datos, pues pese a estar clasificados en la décima plaza, los lucenses es el tercer equipo que menos encaja de la categoría, tan solo superados en ese aspecto por Compostela y Ourense CF, los dos primeros clasificados.
En lo que respecta al Arosa, Rafa Sáez reconoce que el equipo "llega con una moral alta y con ganas de superar la derrota sufrida ante el Silva, algo que ya hemos asimilado en los entrenamientos". Además, desde ese encuentro, el Arosa ha disputado la Copa Diputación, "donde creo que hemos recuperado sensaciones". Sáez ha convocado para el encuentro a los 18 jugadores disponibles que tiene en plantilla, de los que descartará a dos. Entre los convocados no se encuentran los tres lesionados que tiene en estos momentos el Arosa, Manu Rodríguez, Julio Rey y Pedro Beda. Los tres son piezas importantes en este Arosa que se ha reforzado muy bien en enero para afrontar el último tramo de competición con posibilidades de disputar un play off con el que sueña la afición desde hace más de un cuarto de siglo.
