El Atlético pierde parte del colchón

Un gol de Haller en el tramo final reduce la ventaja colchonera

Griezmann festeja uno de los goles del Atlético. |  // EFE

Griezmann festeja uno de los goles del Atlético. | // EFE / iñaki dufour

iñaki dufour

Desatado, con una tormenta perfecta en la primera media hora, el Atlético de Madrid desbordó inicialmente al Borussia Dortmund en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, en ventaja desde el Metropolitano para la vuelta dentro de una semana en el Signal Iduna Park, por los goles de Rodrigo de Paul y Samuel Lino en un comienzo formidable, al que se opuso el contratiempo final del 2-1 de Sebastian Haller.

Un borrón que redujo la demostración del conjunto rojiblanco, que entró al partido como un torbellino. Advertido de la intensidad por la que se mueve su adversario, el grupo de Simeone fue más allá. Lo rebasó. Sin términos medios. No los admite jamás su fortaleza en casa. Ni mucho menos el horizonte de la vuelta en Alemania, a la que acudirá con una renta más corta de lo que mereció, seguramente; mucho menos prometedora, más inquietante.

En ebullición el estadio, una caldera a la altura de la dimensión de la ronda y la ambición que despierta en el rojiblanco cada lance en la anhelada Liga de Campeones, el Atlético también jugó a tope de revoluciones desde el primer instante, lanzado a por un triunfo que creía indispensable para ir con todas las garantías al compromiso del martes que viene. Ese gol de Haller fue lo único que sobró.