Entrevista | Pancho Varona Compositor y músico

“Estoy viviendo una época dorada de mi vida”

El cantautor llega hoy a Porriño con un repertorio que repasa los 40 años que trabajó junto a Joaquín Sabina, para el que solo tiene palabras de agradecimiento

Pancho Varona, durante su gira “Punto y seguido”.

Pancho Varona, durante su gira “Punto y seguido”. / D.P.

El Bar Liceum de Porriño acoge hoy a una historia viva de la música española, el compositor, guitarrista y cantante Pancho Varona, especialmente conocido por acompañar durante cuarenta años a otra leyenda, Joaquín Sabina. Hace año y medio que anunciaron su sonada ruptura profesional, pero, a sus “sesenta y tanto años”, esto no supuso un punto y final para Varona, sino un “punto y seguido”, como así se llama el título de la gira con la que llega hoy a Porriño, en la que promete ofrecer un repertorio preferentemente “salinero”. El concierto será esta noche, a las 23 horas, a un precio de 15 euros.

–El nombre de la gira con la que llega hoy a Porriño es Punto y seguido. ¿Es esta una declaración de intenciones de que la vida sigue tras 40 años junto a Joaquín Sabina?

–Por supuesto. El nombre se le ocurrió a mi manager; me dijo “esto no es ni un punto y aparte ni un punto y final, es un punto y seguido”; y la verdad que fue un acierto porque que es una declaración de intenciones, efectivamente. Por suerte la vida sigue, la carretera es muy larga.

–¿Le molesta que le sigan preguntando y relacionando con Joaquín Sabina?

–Para nada, lo poco conocido que soy es gracias a él, entonces no me puede molestar nunca. Yo le estoy muy agradecido a Joaquín porque gracias a él he tenido una profesión hermosísima durante 40 años; he aprendido a componer canciones a su lado, he aprendido a viajar y casi a leer y a escribir. Hemos sido más que amigos, hemos sido hermanos. Siempre hablaré bien de él.

"Lo emocionante de hacer una canción es que nunca sabes cuándo va a parar de volar; puede que el vuelo sea muy corto o sea infinito"

–¿Cómo está siendo esta nueva etapa en solitario?

–Muy activa. Había gente que pensaba que como ya no estaba con Joaquín iba a dejar de viajar y trabajar, pero al revés, estoy trabajando el doble que antes. Estoy teniendo muchísima actividad y muchos conciertos al año. Sigo viajando a Latinoamérica y he vuelto a hacer canciones, que es algo que tenía un poquito olvidado. Estaba un poco acomodado últimamente con Joaquín y ya no componía, y ahora, de repente, me ha vuelto la ilusión, porque tenía que demostrarle a la gente que eso no se me había olvidado. Sigo viajando, componiendo, actuando en directo… Estoy muy feliz, estoy viviendo una época dorada de mi vida.

–¿Qué tipo de repertorio va a ofrecer esta noche en Porriño?

–Un repertorio eminentemente “salinero”. La gente me conoce por Joaquín Sabina y lo que quieren escuchar son canciones relacionadas con él y conmigo. Aunque siempre hay sitio para cantar alguna canción que le hice a Luz Casal, a Manolo Pena, a Ana Belén o a Miguel Ríos. Depende del día canto una o canto otra.

–Pero dice que ha vuelto a componer. ¿No hay sitio para escuchar algún tema nuevo?

–El año pasado saqué tres temas nuevos, uno en junio, otro en septiembre y el último en diciembre, pero no los suelo cantar porque están más grabados y compuestos como para bandas. Entonces me siento un poquito solo cantándolos sobre el escenario. Todavía no las tengo acomodadas a un concierto pequeñito con guitarra acústica y voz. Además, a la gente le gusta escuchar las canciones antiguas y yo le doy a la gente lo que quiere.

–¿En qué faceta se siente más cómodo, en la de compositor o en la de músico?

–Hace muchos años me sentía muy cómodo en la faceta de compositor, como pez en el agua. Éramos jóvenes, valientes, nada nos frenaba y nos comíamos el mundo a bocados. De eso hará unos 30 años, dedicaba las 24 horas del día a la composición. Años más tarde empezó a gustarme la producción de discos y entonces trabajé para Estopa, Gabinete Caligari, Amaral, y me cansé de la producción. Y ahora estoy más centrado en los viajes porque veo que es la última etapa de mi vida, es el último gran empujón y lo quiero dedicar a viajar todo lo posible; y ahí es donde más cómodo me siento, en el directo, porque sé que, si algún día tengo que frenar un poquito y quedarme en casa, por salud, por cansancio, o por lo que sea, sé que podré dedicarme otra vez a componer.

–El panorama musical ha cambiado mucho desde que comenzó usted, pero la gente sigue cantando los grandes temas de los 80 y los 90. ¿Qué tiene que tener una canción para que siga funcionando con el paso del tiempo?

–Hay una frase de Joaquín Sabina que es perfecta para explica eso. Decía, “una buena canción tiene que tener una buena letra, una buena música y algo más que es lo más importante y nadie sabe lo que es”. Será la magia, la chispa o la suerte. No se sabe donde está la clave del éxito, si se supiera todo el mundo lo haría. Es lo emocionante de hacer una canción, es una lotería, nunca sabes cuándo va a parar de volar; tú la compones, le das la vida, ella echa a volar y puede que el vuelo sea muy corto o sea infinito.

Suscríbete para seguir leyendo